V. MARTÍN, S/C de La Palma
Las 42 viviendas de reposición construidas por el Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma en la zona de Timibúcar, para sustituir a las promociones de los años 50 de Mirca y el albergue, no serán ocupadas solo por familias con escasos recursos, sino también por otras, una minoría, con ingresos mensuales superiores a los 2.500 euros.
El Pleno aprobó ayer los estatutos y contratos de la nueva promoción. El ayuntamiento sigue siendo el propietario de los inmuebles, cobrando alquileres en función de las rentas, según una valoración realizada por la empresa pública Visocan. El alquiler mínimo será de 4,26 euros, para tan solo una familia con recursos económicos muy limitados, mientras que la máxima será de 284,50 euros, para las más pudientes. Habrá que añadir otros 47 euros de comunidad y poco más de 50 de garaje para aquellas unidades familiares que lo soliciten, al tratarse de un artículo de lujo.
En la valoración se encuentran familias con cerca de 2.700 euros de ingresos mensuales, otra de 2.500, alguna de 1.800 y más que perciben entre 1.500 y 1.792 euros.
El contrato de arrendamiento deja en manos de las familias la responsabilidad de solucionar todos los desperfectos que se produzcan no solo en el interior de las viviendas,sino también en las zonas comunes. Una cláusula que la oposición (CC) en la corporación capitalina considera "abusiva". En este sentido, su portavoz, Juan Ramón Felipe, dijo que "debe ser el propietario de la promoción, el ayuntamiento, el responsable de reparar los daños, como ocurre siempre que se alquila un piso".
Felipe tampoco estuvo de acuerdo con los alquileres, entendiendo que el precio máximo a pagar al mes tenía que ser de 50 euros, incluso para las familias con ingresos de casi 2.700 euros mensuales.
Por su parte, el responsable de Obras, Juan José Cabrera, explicó que los precios "están ajustados a lo que cada familia gana. Es lo justo después de los informes realizados, aunque si hay algún error se corregirá".