Las personas con dificultades que residen en las infraviviendas de la trasera del Pancho Camurria han cogido el guante que les ha ofrecido el IMAS para que dejen su actual ubicación.

Con el asesoramiento de la Plataforma por la Dignidad de las Personas sin Hogar, registraron ayer una contrapropuesta al Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife.

Los sintecho proponen, en vez de viviendas por 300 euros al mes, que se trabaje en conseguir y que se les oferten pisos de una habitación por 100 euros o de dos por 150 euros al mes. De esta forma, calculan la ayuda de 1.800 euros para alquiler que les ofrece el consistorio duraría un año y les daría opción a conseguir remontar su situación.

Para la Plataforma que les apoya y les asesora esto es posible, ya que el propietario recibiría al inicio del contrato los 1.800 euros, lo que puede hacer atractivo este acuerdo para los dueños de pisos.

En este tipo de contratos no existirá fianza, debido a las situaciones de exclusión severa de estas personas y a que el consistorio sería garante y podría incluso suscribir algún seguro que ofreciera cobertura a los propietarios en caso de alguna incidencia.

Los arrendatarios, por su parte, se comprometen "a cumplir con las obligaciones normales de cualquier contrato de alquiler en materia de conservación de la vivienda, pago de comunidad y buena vecindad". Además, ofrecen el compromiso añadido de realizar "cursos de formación y capacitación profesional" para formarse hasta que encuentren un trabajo.

De hecho, también se comprometen a aumentar las mensualidades de alquiler en el caso de que consiguieran empleos e ingresos suficientes, para lo que han establecido una tabla de aumentos proporcionales al sueldo.

Desde la Plataforma se ve la propuesta del consistorio como positiva, pero quieren que se adapte al perfil y especiales situaciones de exclusión de estas personas.