El año2012 se cierra con tres asesinatos sin esclarecer en Tenerife. Únicamente el crimen de María de los Remedios Barreto Perera, la vecina de Tegueste que murió por las heridas de arma blanca y los golpes que le propinó su expareja y primo hermano, Mateo Perera Gómez, fue esclarecido en el ejercicio que acaba, después de que el autor se quitara la vida en el mismo lugar del suceso.

Finaliza un año sin excesivas muertes violentas de tipo homicida en la provincia de Santa Cruz de Tenerife, pero en varias de ellas faltan demasiados datos que resultan claves para su esclarecimiento. Y ya se sabe que, con el paso del tiempo, las posibles pistas, los testimonios y los recuerdos de los testigos tienden a diluirse. Y esa circunstancia juega en contra de los investigadores y las familias de los fallecidos, que reclaman justicia.

Curiosamente, los tres casos que no se han resuelto por las fuerzas de seguridad ocurrieron en el Sur de Tenerife, concretamente dos en el municipio de Arona y el tercero en Granadilla, entre los meses de enero y noviembre. Dos equipos de Policía Judicial de la Guardia Civil tratan de identificar, localizar y atrapar a los autores de dos de las muertes, uno en el núcleo de San Isidro, en Granadilla de Abona, y otro en la zona de Costa del Silencio, en Arona.

La investigación del otro caso, que se produjo cerca de Los Cristianos, compete a la Policía Nacional. La repercusión de, al menos, dos de esos sucesos en la opinión pública fue muy discreta. Uno de los que pasaron muy desapercibidos tuvo como protagonista a un indigente en el plan parcial El Mojón. En otro, un vecino de San Isidro fue degollado en su piso.