Después del 6 de enero, el abismo. Esa frase, pronunciada por un comerciante, demuestra la preocupación y la incertidumbre que acompañan al sector ante el inminente comienzo de las rebajas de invierno tanto a nivel estatal como en Canarias. Se trata de una campaña más tempranera que nunca, pues acrranca a partir de hoy lunes y con un sentido que define la reflexión de otro empresario: "A la desesperada porque es la última oportunidad de relanzar el futuro y superar las dificultades inherentes a la crisis económica".

El período de consumo por antonomasia, Navidad y Reyes, no ha sido suficiente al menos en Canarias y no ha logrado satisfacer las expectativas del sector".

Las primeras cifras del balance en el area metropolitana de Tenerife son concluyentes, pues apuntan a un descenso de ventas respecto al año anterior de un 20% en Santa Cruz y un 10% en el municipio de La Laguna.

Los descuentos "agresivos" del 50 y hasta el 60 o el 70% en determinados productos intentarán paliar el previsible descenso de ventas, que puede llegar hasta el 4 por ciento en estas rebajas, con varios elementos en contra como la subida del IVA o la eliminación de la paga de Navidad para los funcionarios. Entre hoy, día festivo, y mañana la mayoría de las tiendas se sumarán al periodo que ya inauguraron el pasado 2 de enero cerca del 40% de los comercios, en la primera temporada sin restricciones por ley de calendario.

La Asociación Empresarial de Comercio Textil y Complementos (ACOTEX) prevé una facturación de entre 3.500 y 3.600 millones durante las rebajas, entre un 0 y un 4% menos que hace un año. Según la Federación de Usuarios-Consumidores Independientes (FUCI), los españoles gastarán una medida de 80 euros en rebajas, un 11,1% menos que en 2012.