La Cueva del Viento de Icod de los Vinos, el mayor tubo volcánico de la Unión Europea y uno de los más grandes del mundo, ha recibido casi 40.000 visitas guiadas desde su apertura al público en 2008, según informó ayer la consejera insular de Museos, Amaya Conde, durante la firma de un nuevo convenio entre el Cabildo de Tenerife y el Ayuntamiento icodense para promocionar y mejorar este espectacular complejo de grutas y pasadizos subterráneos.
Los apenas 200 metros abiertos al público de la Cueva del Viento han recibido en los últimos cinco años una cifra creciente de visitantes, que ha pasado de los 5.637 de 2009 a los alrededor de 13.000 de 2012. Conde señaló que el 64% de los visitantes llegan de fuera de las Islas, la mayoría peninsulares y alemanes.
Esta cifra de visitas no podrá seguir aumentando demasiado en el futuro, ya que según reconoció la responsable del Organismo Autónomo de Museos y Centros del Cabildo "el límite máximo de visitantes por año se ha establecido en unos 15.000 para no dañar este delicado ecosistema subterráneo".
Teniendo en cuenta la progresión en el número de visitas, es muy probable que el techo de afluencia se alcance este mismo año.
El nuevo convenio, de un año de duración, permitirá al Ayuntamiento de Icod organizar visitas guiadas. El objetivo es poner en marcha este año una nueva excursión que permita combinar la visita al Parque del Drago y a la Cueva del Viento.
Las visitas a la cueva están limitadas a grupos de 16 personas y tienen un coste de 15,30 euros para adultos no residentes canarios; 10,20 euros para adultos residentes, y 5,10 euros para niños de entre 5 y 14 años. Está previsto que este año se actualicen al alza esos precios, aunque el Cabildo aún no ha decidido la cuantía del incremento.
La administración insular también tiene previsto invertir en 2013 un total de 110.000 euros en diversas actuaciones de mejora en el interior y el entorno de la Cueva del Viento. Se demolerán varias casas en ruinas que se encuentran cerca de la boca de acceso a la gruta y se mejorarán las condiciones de seguridad en el interior. El consistorio seguirá gestionando el centro de visitantes.