La Audiencia de Cuentas de Canarias, órgano dependiente del Parlamento de Canarias, ha aprobado su Plan Estratégico 2013-2016, un documento en el que se plantean los objetivos de la institución para los próximos cuatros años, que pasan sobre todo por incrementar la calidad de las actuaciones fiscalizadoras, realizar un mayor número de auditorías gestión y comenzar con las auditorías de los sistemas de información, que suponen el 33 por ciento de las auditorías que va a realizar la Institución en el ejercicio 2013.
El empleo masivo de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC), así como la formación del personal son otros de los objetivos con los que se tratará de lograr los retos planteados, informa la Audiencia en una nota.
El presidente, Rafael Díaz, explica que la realización de las auditorías de los sistemas de información situará a Canarias como una de las comunidades autónomas pioneras en la realización de este tipo de fiscalizaciones, permitiendo a este órgano de control externo pronunciarse sobre los sistemas informáticos que actualmente son elementos fundamentales en la gestión de las administraciones públicas.
Con la implementación de este nuevo modelo de auditoría, la Audiencia de Cuentas de Canarias se suma al camino abierto por la Sindicatura de Comptes de la Comunidad Valenciana y que hasta ahora, tan solo el órgano fiscalizador de la Comunidad Balear había seguido, cumpliendo así uno de los objetivos que persigue la llamada Declaración de Pamplona, documento suscrito por todos los presidentes de los órganos de control externo autonómicos en octubre de 2006.
En este sentido, destaca que el Plan Estratégico 2013-2016 pretende abrir una nueva etapa en la Institución de cara a mejorar su labor, la eficacia del servicio a la Comunidad Autónoma y su conexión con la sociedad canaria, para contribuir a que la actividad fiscalizadora "sirva" y se perciba como una "contribución" a la mejora de la calidad y la transparencia.
El objetivo, explica, es que "los ciudadanos de Canarias mejoren su confianza en las administraciones y en el uso que en ellas se hace de los recursos públicos, para lo que es esencial asegurar un control adecuado de la gestión".
Para lograr estos objetivos, el presidente señala que la institución ha demostrado a lo largo de estos últimos veinte años de actividad que cuenta con valores esenciales como su "independencia, integridad, una gran experiencia, y la decidida apuesta por la transparencia en sus actuaciones".
Igualmente, Rafael Díaz indica que la mejora de la calidad de las actuaciones fiscalizadoras será el elemento central en que se concentren todos los esfuerzos de la Institución en el periodo de vigencia del Plan, "porque los informes deben convertirse en instrumentos esenciales para la toma de decisiones que mejoren el funcionamiento de los servicios públicos".
TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN
Para ello va a ser fundamental el uso intensivo de las tecnologías de la información y la comunicación, por lo que será preciso realizar en la institución una serie de actuaciones encaminadas a este fin como renovar la página web y la intranet, la puesta en marcha de la sede electrónica y el registro telemático, la adquisición de un nuevo centro de proceso de datos o la elaboración de un plan de seguridad informática.
Asimismo, el presidente del órgano de control externo destaca el importante papel que en esta nueva etapa debe jugar el personal, al que califica como el activo "más importante" de la institución y del que depende, en gran medida, el éxito del Plan Estratégico, razón por la cual, se incluye en el documento un conjunto de medidas tendentes a mejorar su formación y motivación.
Díaz subraya también que en esta etapa la institución va a poner todas sus energías en potenciar las relaciones con otros órganos de control, así como con los organismos fiscalizados y los medios de comunicación social, dado que considera que el fin último de la Audiencia de Cuentas de Canarias es "servir a la sociedad y coadyuvar al mejor funcionamiento y transparencia del sector público canario".