La consejera de Empleo, Industria y Comercio del Gobierno canario, Francisca Luengo, lleva una semana de reuniones con los representantes sindicales del Servicio Canario de Empleo (SCE) para completar en el menor tiempo posible -mes y medio es el objetivo- una reorganización "amplia, completa e imaginativa" de este organismo encargado de diseñar y desarrollar las políticas sectoriales en las Islas. La razón es adaptarlo a "la nueva realidad" o, lo que es igual, hacer frente a los recortes que tiene que encajar este año -30 millones menos que en 2012, una bajada interanual del 75%-.
Luengo admite que será "muy difícil" hacer políticas de empleo tras el desplome de los recursos que sufrió su área en las cuentas que el Ejecutivo regional aprobó para 2013. Aunque la consejera insiste en que la salida de su antecesora, Margarita Ramos, se debió a "un criterio personal que no me toca desvelar", lo cierto es que el malestar de Ramos por esta brutal caída de los fondos para una materia considerada "fundamental" por el Gobierno fue una de las causas oficiosas que explicó su inesperada salida del Ejecutivo.
En todo caso, deja claro que los recortes no impedirán al Gobierno buscar "alternativas" y reivindica que el empleo es "una de las cuestiones prioritarias" del Ejecutivo. La falta de fondos, agrega, "obliga" a efectuar la reorganización del SCE de forma que "no se produzca lo que quieren otros desde fuera", en alusión a la posibilidad de que se despida personal. "Buscamos una solución para evitar una posible destrucción de empleo público", asegura Luengo.
En este contexto, explica que su plan busca conciliar la vida laboral de los trabajadores del SCE al tiempo que lo "moderniza". Esta actuación explica la necesidad de cambiar sus objetivos "dentro de lo posible".
Eso sí, el tijeretazo presupuestario, ratifica, se debe a la caída de los fondos sectoriales provenientes de los Presupuestos Generales del Estado para Canarias y recuerda que de las cuentas estatales depende cerca del 65% de los recursos globales regionales. "El Estado hace los recortes, pero al Gobierno canario le toca dar la cara, y lo hacemos", defiende.
Luengo también lleva Energía y Comercio. Sobre la primera, avisa que el plan nacional en esta materia excluyó actuaciones que evitarían posibles emergencias en las Islas. Acerca del comercio, promete la continuidad de proyectos europeos que, confía, impulsarán la actividad tras reconocer que el área perderá mucho dinero este año.