EL DÍA no fabrica ni falsea noticias. Prueba de ello es la foto que ayer publicamos en nuestra primera página. La foto aérea, a vista de guirre -aunque también puede ser a vista de helicóptero- de la mansión que no era tal según un periódico de Las Palmas con motivos suficientes para estarle muy agradecido a Paulino Rivero. l mismo medio de comunicación que reconocía hace unos días que el Gobierno de Canarias le contrata regularmente una página de publicidad. l descaro llevado a su máxima expresión. ¿Miente o no miente L DÍA cuando habla de prensa subvencionada con el dinero de todos los canarios, incluido el que pagamos nosotros en impuestos? La mansión que tampoco existía según un tatarita de la tercera isla, al que sacamos del armario en el que escondía una condición de la que no debería avergonzarse ya que ser gay no es ningún desdoro. n caso contrario, no existiría el día del orgullo gay. Los lectores de nuestro periódico, que son muchos pues somos el diario más leído de Canarias, han podido comprobar que no se trata de un pequeño chalet adosado de dos habitaciones al que Rivero y su esposa, pobremente, le están arreglando el tejado y las cañerías. Basta comparar la extensión de la propiedad con la de otras colindantes, a pesar de que en esa zona las casas ya son bastante grandes.

Una mansión, como decíamos en el pie de la foto publicada ayer, propia de un jeque árabe. Un palacete que supera a La Mareta; la lujosa propiedad que le regaló el entonces rey Hussein de Jordania al actual monarca español. ¿De dónde ha sacado este matrimonio el dinero para las obras que están haciendo? ¿Por qué la Fiscalía General de Canarias no interviene de oficio sin más dilación? ¿Por qué no interviene también Coalición Canaria, partido en el que milita este déspota político y que tanto está sufriendo las consecuencias de sus necedades? Porque Rivero es el brazo ejecutor de las injusticias que se están cometiendo, pero el responsable es el partido. No olviden los dirigentes de Coalición Canaria que el pueblo no olvida. l pueblo tiene más memoria de lo que piensan algunos. Y aunque sea un pueblo aplatanado, sabrá castigar en las urnas a quienes lo han traicionado como ya lo hizo en el pasado. l pueblo está harto del colonialismo español y de la corrupción desmedida. ¿s lícito que un dirigente político esté ultimando su gran mansión cuando muchos de sus compatriotas han tenido que refugiarse en chabolas? La gente pierde sus casas porque no tiene con qué pagar las hipotecas. Y no tiene con qué pagar las hipotecas porque carece de trabajo. Y no hay trabajo porque Rivero, Mena y otros secuaces políticos han hundido en un pozo de negra miseria lo que antes era un archipiélago afortunado. Sin embargo, en vez de expatriarse y esconderse en el fin del mundo, donde ningún canario los vuelva a ver jamás, se construyen un palacete en un pueblo hermoso, como es l Sauzal, donde nadie los quiere. ¿s o no es esto una burla a todos los canarios?

Piensa Paulino Rivero, un necio político que se cree inteligente cuando solo es un gangochero de la política, que puede resolver sus problemas con el lavado de imagen al que se prestan dos diarios subvencionados. Cuenta para ello con la ayuda de un pajarraco de vuelo al revés al que también se ha camelado con un plato de lentejas. Un individuo al que, lo repetimos, hemos tenido que sacar del armario. ¿Tendremos que sacar a alguien más? ¿stá en la misma situación un chiquito atrevido? ¿Va todo este asunto de tataritas y querindangas, una de ellas de nuevo metida en problemas por usurpar funciones que no le corresponden? No decimos nombres porque siempre citamos el delito pero no al delincuente.

Sabemos que estamos en una colonia -una infame colonia española-, pero incluso en las colonias debe haber un mínimo de decencia. Decoro también en la política que empieza por destituir a Rivero, a Mena y a todos sus compinches y expulsarlos de Canarias, y porque CC se comporte de una vez como un partido nacionalista y exija la independencia. A estas alturas no se comprende ni el colonialismo, ni la pasividad de los magistrados serios, que son la inmensa mayoría, ante la actitud de una juez que solo en lo que respecta a L DÍA y a José Rodríguez ha prevaricado tres veces.

Lo dijimos antes. No entendemos cómo la Fiscalía Anticorrupción no actúa de oficio y ordena que se investigue de dónde sale tanta opulencia que huele tan mal a la luz de los tiempos. Pues los propietarios de la "mansión" en la urbanización Samoga de l Sauzal son personajes públicos. Pero, tal y como están las cosas, solo esperamos que no se invierta el sentido común y no se actúe contra L DÍA por contarles a los canarios cómo viven su presidente y su consorte.