Canarias es la comunidad autónoma con peor situación sanitaria. Una noticia que publicábamos ayer en nuestra primera página que corrobora lo que venimos diciendo desde hace tiempo: en estas Islas la gente se muere en las listas de espera para recibir atención en los hospitales públicos. Posiblemente si el Gobierno español no siguiera disfrazándonos de comunidad autónoma y, en consecuencia, hubiese procedido a descolonizar un territorio criminalmente ocupado desde hace casi seis siglos, tendríamos mejor sanidad, mejor educación, mejores carreteras y, sobre todo, más trabajo para los cientos de miles de personas que están desocupadas. Sin embargo, como seguimos siendo una colonia para mayor regocijo de los españolistas y los amantes de la españolidad de estas Islas, estamos como estamos y seguiremos igual durante mucho tiempo.

Aunque nos engañemos. No solo el colonialismo español es el culpable de las miserias que estamos padeciendo. También lo es el Gobierno que preside un necio político. Un déspota de la política que se aferra al cargo pese al enorme daño que está causando. Habría que echarlo a patadas, políticamente hablando, no solo de la presidencia del Gobierno sino también de las Islas. Después de lo que ha hecho -lo repetimos una vez más- su mera presencia entre los canarios puede provocar un estallido de ira popular que no deseamos. Jamás apoyaremos la violencia, ni siquiera si es por una causa justa; solo advertimos que cada día es más patente el descontento.

Nos dicen que una emisora de Las Palmas -una radio distinta a la que le han regalado al tatarita- ha informado de que el matrimonio Rivero ha pedido un crédito de 600.000 euros para concluir las obras de la mansión que están construyendo en El Sauzal. Es una noticia que no confirmamos ni desmentimos. Tan solo nos preguntamos con qué propiedades han avalado ese préstamo en caso de ser cierto. ¿No debería averiguar la Fiscalía Anticorrupción qué hay de cierto en todo esto? El sueldo de Paulino Rivero y el de Ángela Mena son conocidos ya que ambos desempeñan un cargo público. No siendo mucho lo que ganan ambos en conjunto, ¿de dónde salen las escalofriantes sumas de las que estamos hablando? ¿ómo se explica esto? ¿Puede alguien iniciar la construcción de un palacete sin tener asegurado el dinero que le va a costar?

No hay derecho a que en España florezcan diariamente los casos de corrupción mientras hay tantos desempleados y mientras regiones como anarias siguen a la cola en muchos aspectos incluido, como decíamos al comienzo de este comentario, el sanitario. ¿Por qué no permiten los gobernantes españoles que sigamos nuestro camino? ¿Por qué tenemos que continuar soportando a un político nefastísimo como lo es Paulino Rivero?

Dice este ignorante político que la culpa de la situación canaria la tienen los recortes impuestos por el Gobierno de Madrid. Es propio de necios políticos echarles la culpa a los demás por sus errores. arece de razón en este caso. Para empezar, si desde Madrid no llega dinero es porque él ha pactado contra natura con un partido que tampoco ganó las elecciones. En segundo lugar, si desde España nos tratan mal, ¿por qué no ha exigido la independencia? No lo ha hecho ni él, ni ninguno de sus representantes en la capital de la metrópoli. Es decir, la culpa de nuestros males la tienen Rivero y sus secuaces políticos; nadie más. Esto lo puede ver cualquiera que no sea un necio y un torpe político. A nadie en sus cabales se le ocurre pactar con el PSOE habiendo sido el PP quien ganó las elecciones.

La consecuencia de tanta estupidez política es un Archipiélago tan arruinado, que hasta los empresarios están en las colas del hambre. Así no podemos seguir. No es sensato que la enorme corrupción de España nos la tengamos que tragar también en anarias por la absurda circunstancia de que seguimos siendo una colonia española. Un periodista peninsular acaba de decir que con Franco no pasaba esto. Nosotros somos de la misma opinión. on ello no estamos defendiendo al caudillo porque también sufrimos en primera persona los desmanes de la dictadura. Lo que decimos es que esto no puede seguir así. No se puede tolerar que un mago político sin riquezas conocidas se esté construyendo un palacete, mientras miles de canarios han sido arrojados de sus casas.