Un estreno que llegó por casualidad y la poderosa atracción que ejercían los ritmos cubanos sobre su música se convirtieron en los cimientos de Bilongo, un grupo de Icod de los Vinos que germinó hace cuatro años casi sin querer. "Un amigo necesitaba recaudar dinero para las Fiestas del Carmen de la playa de San Marcos y nos propuso la idea de ofrecer un concierto", reconoce José Antonio Vera.

Vera y otros cuatro compañeros montaron media docena de canciones que "gustaron" y ahí se activó un proyecto que en el 2011 sufrió una reconversión interna. "Unos se fueron por cuestiones laborales y otros no quisieron formar parte de lo que hoy es Bilongo", puntualiza Vera.

Gustavo Díaz es el director musical y el trompeta de un grupo integrado por Alejandro Hernández (güiro y voz), Fernando Cruz (tres cubano), Jonay Hernández (guitarra), José Díaz (bongó y campana), Julio Castellana (conga), Francis de la Rosa (baby bass), José Antonio Vera (maracas y voz) y Víctor Herrera (solista). Esos son los mimbres de "Yo soy el son", la primera aventura discográfica -que han grabado con Wilmer- en la que se han embarcado unos músicos con "genética" murguera.

Vera, exdirector de la murga Los Tiralenguas, deja claro que "a pesar de que muchos miembros hemos coincidido en los dos sitios, son dos proyectos diferentes que no están vinculados", aclara el componente de Bilongo. "Nos gusta fusionar los estilos tradicionales y los más modernos", precisa.

De esa fusión de estilos -bolero, danzón, guaracha o son- salió un boceto de álbum en el que participaron todos los integrantes de Bilongo. "Cada uno facilitó una lista con una docena de temas, se sumaron los votos y los más populares entraron en la selección definitiva", describe Vera en relación a una lista en la que hay títulos tan conocidos como "Son de la loma" o "Lágrimas negras". "Lo hicimos de forma democrática y teniendo en cuenta todas las opiniones".

Sobre la apuesta tan directa que han hecho por el repertorio que se hace en suelo cubano, el vocalista de Bilongo precisa que "todos los géneros son bienvenidos, pero esta vez apostamos por Cuba. Habrá que esperar para ver si optamos por otros sonidos si hay otro disco", avanza Vera.

Bilongo, por ahora, apuesta por el acento cubano de un repertorio que ha sido moldeado con un único propósito: "Queremos gustar y que la lista de conciertos siga creciendo (ríe)... No nos ha ido mal, pero el objetivo es dar un salto de calidad para llegar a tener más protagonismo en el panorama musical local", confiesa Vera. A la vera del famoso tema "Candela", Bilongo parece dispuesto a aprovechar el impulso de un estreno discográfico que ha recibido una gran acogida.