Baltasar Rigo Cifré. Este es el futbolista por el que se ha decantado Quique Medina para reforzar la defensa del Tenerife. En la víspera del cierre del mercado de fichajes de invierno, el club anunció la contratación, para lo que queda de campaña y otra más, de este jugador nacido hace 27 años en la localidad mallorquina de Campos.

Hasta ayer, el nuevo integrante de la plantilla blanquiazul pertenecía al CD Numancia, equipo al que se incorporó el pasado verano y en el que jugó solo dos partidos: uno en Copa ante el Alcorcón (12 de septiembre) y otro en Liga con el Girona como adversario, en Montilivi, el domingo 28 de octubre.

Tras recibir hace dos días una oferta del Tenerife, al que había sido ofrecido a mitad de enero por el intermediario Joaquín Vigueras, Rigo no se lo pensó ni un minuto y pactó su desvinculación del club de Los Pajaritos. "Tenía muchas ganas de salir del Numancia para ir al Tenerife, así que todo fue fácil y rápido", contó ayer Baltasar.

El central tiene experiencia en Segunda A, Segunda B e incluso en Primera, categoría en la que debutó el 5 de diciembre de 2010, al pasar del filial al primer equipo del Almería, estando José Luis Oltra en el banquillo del club andaluz.

Este central zurdo y de 185 centímetros de estatura, empezó a hacer carrera en los filiales del Real Mallorca. De ahí pasó al Huesca, con el que vivió el ascenso a Segunda A de 2008. Tras otro curso más en la escuadra oscense, y teniendo al exblanquiazul Antonio Calderón como entrenador, Baltasar se unió al plantel del Almería B. Pero no tardó en regresar a la entidad de El Alcoraz para competir nuevamente en la categoría de plata. Posteriormente, en el curso 11/12 militó en el Girona. En ese destino pudo conocer a Chechu Flores, antes de que el interior fichara por el Tenerife al final de la pretemporada. También se reencontrará con Guillem Martí y Javier Moyano, a los que igualmente tuvo como compañeros.