Dos madres han llegado a una situación límite, al no encontrar solución en los Servicios Sociales del ayuntamiento, por lo que recurren a la solidaridad de la sociedad para no verse en la calle con sus hijos.

La Plataforma por la Dignidad ha ayudado en lo que ha podido a las señoras, y dicen que ambos casos son la "viva imagen de la miseria y la indignidad que viven tantas familias, abandonadas por unos dirigentes políticos que viven a años luz de la realidad de la calle".

El primero de los casos se trata de Concepción, de 42 años de edad, con un hijo de 25 años y una hija de 8 años. La situación de paro le ha llevado a no poder pagar el piso dos meses, por lo que el día 13 del presente mes se procederá a su desahucio. Concepción dijo que ni ella ni su hijo tienen trabajo y que comen gracias a la caridad de ciertos vecinos. "Me siento impotente; me han hecho pasar muchas humillaciones cerrándome puertas en el ayuntamiento a la hora de pedir ayuda, pero no estoy dispuesta a que me echen a la calle como algo sucio".

Añadió que no puede más y que no tiene ganas de vivir; no entiende cómo hay casas vacías en el municipio y que no las entreguen a quien en verdad las necesita, permitiendo que se vean en la calle.

El otro caso es peor aún, ya que se trata de María, que vive en condiciones infrahumanas con su hijo menor en una habitación de un piso. No puede pagar y la echarán a la calle en breve. Cuenta que estuvo en Servicios Sociales "y no me ayudaron, pero sí me advirtieron de que Menores me podía quitar a mi hijo". Arregló la PCI, pero no se la dan.