María Isabel Hernández Cabrera, que vive en Las Galletas junto a su hija, está sufriendo lo que muchos entenderían como un evidente ejemplo de burocracia incongruente, incomprensible e injusta, aunque seguro que las administraciones hallarían explicaciones legales. Mientras aún espera por los 12.600 euros más intereses (que elevan la cifra a más de 14.000) que la Comunidad Autónoma le debe por la condición de dependiente de su madre, tristemente fallecida el 9 de agosto de 2011, el mismo Gobierno regional le ha embargado dos coches y hasta una cuenta de uno de sus hijos por los 10.072 euros que tiene pendientes con la Agencia Tributaria Canaria por el impuesto de donaciones tras recibir, en 2004, dos apartamentos como herencia.

Pese a los numerosos intentos de María Isabel y sus familiares, especialmente su hijo Pedro Cabrera Hernández, de convencer a la administración autonómica de que le canjeen una deuda por otra, cambio con el que, incluso, aún deberían recibir un considerable resto de casi o más de 4.000 euros, la responsable de Tesorería de la Agencia Tributaria se ha enrocado y no acepta esa fórmula, por lo que, ante su impago, ha decidido embargarle dos vehículos a nombre de María Isabel, un Toyota Yaris de su hija y un BMW de su hijo Pedro, que no usa tras quedarse inválido por un accidente de tráfico en 2009.

Según subrayan a El Día, la postura de dicha Tesorería choca con la de la responsable de Recaudación del mismo Gobierno autónomo, que sí respalda el canje.

Aparte de los dos choches, la Comunidad ya ha comenzado a embargar algunas cuentas de otro de los hijos de María Isabel, al que este mes le han cobrado 32,26 euros de una y, en enero, unos 90.

María Isabel, de 60 años, no trabaja desde hace mucho tiempo y solo recibe en torno a 70 euros mensuales de Asuntos Sociales como ayuda para comida. Su hijo Pedro, que antes de quedarse inválido era autónomo en la rama informática, percibe de 360 euros mensuales que consume por los 100 que le da a su excompañera por las dos hijas que tienen, por los gastos de luz y agua y por un préstamo.

María Isabel vive con lo que aporta en su casa el marido de su hija, pero recalca que su situación le impide, por completo, afrontar esta reclamación, que considera incomprensible si, al mismo tiempo, la Comunidad le reconoció a su madre una paga mensual de 494,66 euros desde 2008.

Esa cuantía, sin embargo, solo la cobraron durante los seis meses previos al fallecimiento de su madre (María Luisa Cabrera Díaz), por lo que, dado que se ha de abonar todo el periodo reconocido y, en caso de muerte, se ha de hacer de golpe, el propio Gobierno regional resolvió pagárselo en cinco pagas entre 2012 y 2016 de 2.519 euros.

Sin embargo, esas pagas prorrateadas nunca las ha percibido, dinero que, además, se elevaría con los intereses acumulados desde 2008 por la tardanza.

Aunque se dirigieron en mayo de 2011a la Agencia, siguen sin recibir respuesta y todo apuntan a que presentarán una demanda.