Fuentes sindicales de Caixabank avanzaron ayer que, del ajuste de plantilla de 3.002 personas que pretende llevar a cabo la empresa en toda España, el grueso del recorte afectará al personal de oficinas (1.721 empleados) y que, además, plantea prescindir de 743 personas de Banca Cívica que ahora están en situación de ERE temporal.

Los sindicatos ayer mantuvieron la segunda reunión con la dirección de Caixabank para abordar el recorte de plantilla que quiere aplicar esta entidad después de absorber Banca Cívica y Banco de Valencia.

Según los sindicatos, la dirección de Caixabank también les informó de que, del global de afectados, 352 personas corresponden a servicios centrales y 186 a los territoriales, aunque no detalló cómo distribuirá el recorte por comunidades.

Este periódico consultó a la dirección territorial en Canarias, que se remitió al comunicado del lunes pasado en el que la empresa deja claro que CaixaBank cree necesario llevar a cabo un plan de reestructuración para el que se abrió un periodo de "diálogo y negociación" con los sindicatos "que se podría prolongar hasta finales de abril", por lo que ve "precipitado" poner cifras al ajuste ahora.