La Consejería de Educación sigue adelante con su idea de convocar, por primera vez en tres años, oposiciones a la enseñanza. Así se lo confirmó ayer en Mesa Sectorial a los sindicatos docentes, en su mayoría detractores de la iniciativa, a quienes detalló sus planes al respecto: la intención de la Administración, pendiente de la bendición del Ministerio, es acumular las ofertas de 2011 y 2012 para convocar alrededor de 130 plazas.

El director general de Personal trasladó a los representantes del profesorado que solo sacará plazas de determinadas especialidades: inspectores y maestros de inglés y francés.

Fuentes consultadas por este periódico apuntan a que el Ministerio será flexible con las pretensiones de Canarias, como lo ha sido con otras comunidades autónomas que ya han anunciado ofertas de empleo docente por encima del 10% de la tasa de reposición -el personal que causa baja por jubilación o fallecimiento- que en principio se permite.

La oposición sindical a la convocatoria de oposiciones tiene matices: hay organizaciones que lo hacen frontalmente y otras -fundamentalmente ANPE- que la ven con buenos ojos siempre que supongan un amplio volumen de plazas. Los reparos se deben, sobre todo, a los perjuicios que se ocasionaría al profesorado interino y sustituto. Por ello, todos los sindicatos -también ANPE- coinciden en reclamar la modificación de la orden y el decreto que regulan las listas de empleo en las Islas, que a su juicio no ofrecen garantías de estabilidad para este colectivo como sí lo hacen las normativas de otras regiones del país.

Canarias es una de las comunidades con mayor nivel de interinidad en la enseñanza. Desde 2009 no se convocan oposiciones a maestro.