Continuando con la exposición que hice anteayer en mi artículo "Recursos ajenos", donde abordaba la problemática de la exploración y explotación de hidrocarburos en aguas de la Zona Económica Exclusiva de Marruecos y, por tanto, en la Plataforma Continental marroquí, y de la propiedad de los mismos, hoy quiero incidir en este delicado tema, por cuanto España ya está haciendo cuentas de los beneficios que le reportaría la rapiña de esos yacimientos de petróleo y/o gas, que pretende realizar bajo el inconsistente argumento de que se actuaría "desde este lado" de una supuesta mediana (no aceptada por Marruecos), y recurriendo una vez más a la tan cacareada "españolidad de Canarias", tan precaria, por otra parte.

Dando por sentada la sólida y rigurosa argumentación de Derecho Marítimo, ¡¡absolutamente incontestable e irrebatible!!, que hacía en el citado artículo, el nudo gordiano de la cuestión, como ya he reiterado, es reconocer al país verdadero dueño de esos recursos naturales que, desde luego, no es España. Eso lo saben perfectamente los políticos de CC de las Islas Orientales, cuya demagogia les lleva a oponerse a las previstas prospecciones petrolíferas, en lugar de reclamar -como sería lógico en quienes se autoproclaman nacionalistas- la propiedad de esos posibles yacimientos; desestimando irresponsablemente esa inmensa riqueza que Canarias podría compartir con Marruecos.

Y aquí hay que hacer una importante precisión respecto a las noticias filtradas interesadamente. Se trata de la supuesta zona de prospección, situada virtualmente a 50 km. al Este de Fuerteventura y Lanzarote según se ha hecho público. Teniendo en cuenta la tabla de reconversión de kilómetros a millas náuticas o millas marinas en que se miden las distancias en el mar y en los océanos, tenemos que 50 km. equivalen exactamente a 26,99 millas náuticas, que supone más del doble de las consabidas 12 millas alrededor de cada isla de provisional "soberanía política" española. Lo cual quiere decir que se estaría actuando en aguas marroquíes. ¿Tiene acaso España permiso tácito o expreso de Marruecos para realizar prospecciones en aguas de su soberanía?¿De qué estamos hablando entonces, si España no solo actuaría ilegalmente sino, además, extraterritorialmente? Ni siquiera el peregrino argumento de considerar los espacios marítimos de Canarias como una "prolongación" de la ZEE española (que, repito, ¡¡no está desarrollada aún!!) sería válido debido, precisamente, a esa extraterritorialidad ya que el Archipiélago canario está situado en el continente africano, a 1.400 km. de las costas meridionales españolas, que equivalen a nada menos que a 755,93 millas marinas. O sea, 555,93 millas más que las 200 reconocidas en la Convención de Jamaica para los Estados ribereños, continentales y/o archipelágicos. Y, por supuesto, no se sostiene, con el Derecho Internacional Marítimo en la mano, que España pretenda tener otra Zona Económica Exclusiva más allá del límite exterior de la que legalmente le corresponde como país de la Península Ibérica, que comprendería: al Norte, el mar Cantábrico; al Este, el Mediterráneo; al Sur, las aguas del Estrecho de Gibraltar, adyacentes con Marruecos, y sin delimitar todavía; y al noroeste y suroeste, el océano Atlántico, excepto las costas de Portugal.

Otra cosa es "vender la moto" de que los hidrocarburos que supuestamente guardan las Islas valen cuatro veces más que el PIB de Canarias; y que "el potencial de la producción isleña es del 62% de los recursos del país". ¿De qué país? La Asociación de Compañías de Investigación, Exploración y Producción de Hidrocarburos (ACIEP) se han apresurado a hacer las "cuentas de la vieja", y ya dan por hecho que España podrá disponer de esa inmensa riqueza cifrada a priori en 157.500 millones euros según los actuales precios de la OPEP.

Según la información que se ha filtrado a modo de señuelo, para confundir y manipular a la opinión pública canaria, a la que le han comido el coco con el no a las posibles prospecciones y/o extracciones, el subsuelo marino frente a las costas de Lanzarote y Fuerteventura (¡¡que correspondería a la prolongación natural de la Plataforma Continental de Marruecos, hasta que Canarias no sea un Estado archipelágico, libre y soberano, y se negocie el trazado de la correspondiente mediana!!), esconde una fortuna en recursos energéticos según un estudio realizado por la citada patronal. El problema radica en que España sigue considerando suyos esos posibles yacimientos

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