En la plantilla del Tenerife no hay muchos futbolistas que hayan sido partícipes de un ascenso a Segunda División A. Uno de ellos, el que tiene esa experiencia más reciente, es Nico, que jugó 45 partidos y marcó cuatro goles con el Guadajalara en la Liga en la que el club manchego subió a la categoría en la que compite actualmente, la 2010/2011. Desde esa vivencia, el mediapunta murciano analiza las opciones del representativo.

¿Hay alguna similitud entre las sensaciones que tuvo en el Guadalajara hace dos años y las que nota ahora en el Tenerife?

Viví aquel ascenso desde un punto de vista distinto, porque quedamos segundos y tuvimos que afrontar la recta final de otra manera, por aquello de que el líder (Lugo) nos llevaba ventaja y sabíamos que nos tendríamos que enfrentar a tres eliminatorias. En cambio, el Tenerife está luchando por quedar primero.

Quedan ocho jornadas, el Tenerife tiene cinco puntos de margen...

Y también hay algo muy importante, el "golaverage" ganado con el Leganés. Aunque, si todo va bien, creo que no lo necesitaremos. Nos quedan ocho finales, partidos ante rivales que se jugarán mucho, pero el Tenerife está muy bien y creo que no hará falta cambiar nada de lo que estamos haciendo; y si se hace será para seguir mejorando.

Por tanto, ¿prevé un aumento de la dificultad en lo que queda?

Las cosas se van a complicar. Nos enfrentaremos a equipos que quieren clasificarse para el "play-off" o que tratan de evitar el descenso y que están en una dinámica positiva. Tanto dentro como fuera de casa se va a incrementar la dificultad. Los partidos serán más reñidos y disputados. Por tanto, ahora más que nunca, el Tenerife tendrá que ser inteligente y muy listo.

¿A qué se refiere?

A que, por ejemplo, habrá que saber jugar de una manera o de otra según nos convenga. Pero también me refiero a la manera de plantear los partidos, a tener claro cómo mantener un resultado en un momento determinado, a ser capaces de conservar o aumentar la distancia de puntos. Y para todo eso tenemos al cuadro técnico, que lo está haciendo muy bien.

¿Cómo se están preparando mentalmente para el tramo final?

El cuerpo técnico nos está mentalizando para mejorar cada día. Nos hace ver que los últimos partidos serán vitales, que no podemos perder la confianza y que tenemos que ser fieles a nuestro trabajo, a nuestras ideas, a nuestro juego. Y también que tenemos que saber administrar la ventaja.

¿El Leganés es la única amenaza?

Solo descartaría al cuarto, al quinto... No creo que vayan a alcanzarnos. Pero considero que el Leganés y el Real Oviedo están en una dinámica positiva y que hay que tenerles miedo. De todas formas, cualquier equipo querría estar en la situación del Tenerife.

¿Se ha puesto a desmenuzar el calendario para hacerse una idea de lo que le espera al Tenerife?

Aunque se diga que no, que lo importante es ir partido a partido, todos nos ponemos a mirar cuáles son los posibles rivales, cómo van los perseguidores, las estadísticas, los números... Es inevitable meterte en páginas de información de fútbol y repasar esos datos, pero debemos centrarnos en el presente, porque nos quedan ocho finales y ahora no hay que pensar en las siete últimas.

Entonces, ¿en qué quedan sus preferencias sobre el posible rival en la fase de ascenso?

Cualquier líder será un rival muy difícil. Pero luego entras en detalles y te das cuenta de que en el Grupo III hay aspirantes que tienen campos de césped artificial, o que en el II está el Alavés, que apunta a acabar como líder y que es un buen equipo. Seguro que cualquier adversario será complicado, aunque si hay un rival temible es el Tenerife. Y así debe ser hasta el final de la temporada.

¿Sería conveniente asegurar pronto el liderato o preferiría alargar la tensión competitiva?

El Tenerife tiene que quedar primero, independientemente de si lo consigue en la última jornada o no, y creo que cuanto antes lo logre, mejor. También es verdad que si se alcanza ese objetivo con antelación, el equipo no tiene que bajar los brazos ni dar nada por hecho. No nos podemos relajar, porque habría que llegar al final con la máxima ilusión, con tensión.

¿Está preparado el Tenerife para cualquier adversidad?

Ya lo hemos demostrado. El equipo siempre se ha levantado después de los malos partidos. Ha respondido, ha dado la cara y ha ganado. Sin ir más lejos, acabamos de jugar dos partidos seguidos a domicilio y el balance fue muy bueno. El Tenerife está preparado para estas ocho finales. Daremos nuestro mejor nivel en la recta final.

¿Entiende los miedos o las inquietudes de un aficionado?

Los jugadores tenemos la ventaja de que sabemos que somos capaces de revertir una situación estando en el campo. El aficionado sufre más porque no puede hacer nada, aunque a veces quiera.

¿Se sienten apoyados?

Sabemos que hay gente que confía mucho en nosotros. Pero lo más importante es la unión que hay en el vestuario, la confianza que tienen los técnicos en los jugadores. Eso es lo principal. Todos nos tenemos que sentir muy importantes en este tramo final, porque puede jugar cualquiera. Se han dado casos de compañeros que no estaban entrando en las convocatorias, como Ayoze o Alberto, y que ahora son titulares. Debemos remar en una misma dirección, porque el equipo lo está haciendo muy bien y sería una pena que nos descentráramos, creyéramos cosas que no son y nos torciéramos.

¿Se percibe ese compromiso?

Es difícil mantener la motivación cada día, porque todos queremos jugar. Pero el entrenador está sabiendo llevar muy bien esta situación. Está consiguiendo que todos pensemos que somos importantes. De hecho, se está viendo. Todos estamos teniendo oportunidades y nos sentimos partícipes de los resultados. Si seguimos así, podremos alcanzar el objetivo del ascenso y sentirnos muy orgullosos.