Neutralizar la ventaja del Tenerife por tercera vez ya era demasiado para el Coruxo. Esa es la impresión que se llevó Antonio Gómez del Heliodoro. "El tercer gol nos hizo mucho daño", comentó el entrenador del equipo pontevedrés tras el partido.

"El Tenerife salió muy fuerte y se aprovechó de que nosotros jugamos un poco cómodos al principio, pero fuimos de menos a más y pudimos empatar", opinó Gómez sobre el 1-1 con el que acabó la primera parte del encuentro. "En el segundo tiempo volvió a pasar lo mismo y respondimos de igual manera. En cambio, del posible 2-3 pasamos al 3-2 y, a partir de ahí, el rival fue muy superior en todos los aspectos", añadió.

El técnico del Coruxo afirmó que el tanto que anotó Yago Yao en propia meta supuso "un mazazo" para el conjunto gallego. "Tras el 3-2 ellos se vinieron arriba y nosotros acusamos el desgaste físico".

Gómez confesó que el potencial de la plantilla del Tenerife fue motivo de conversación en el vestuario del Coruxo. "Los chicos comentaban que la diferencia está en que cada jugador que entra iguala o mejora al que estaba".