El Centro de Recuperación de Fauna Silvestre La Tahonilla, del Cabildo de Tenerife, inició, como todos los años por primavera, las tareas de recogida de crías de aves encontradas caídas de los nidos o extraviadas de sus padres.
La consejera insular de Medio Ambiente, Ana Lupe Mora, explica que los que normalmente ocupan la guardería del centro son las crías de cernícalos y los búhos, pero este año los primeros inquilinos han sido una cría de alcaraván y otra de polla de agua, dos especies que viven en hábitats totalmente opuestos.
El alcaraván, conocido también como "pedroluis", es "nuestro correcaminos particular". Habita en zonas áridas de las medianías del Sur y corre más que vuela, el ejemplar alojado en las instalaciones del centro fue recogido en el Valle San Lorenzo.