Miembros de la Guardia Civil detuvieron en Adeje al narcotraficante colombiano John Mauricio Z.F., de 33 años, por su vinculación a una organización que se dedicaba a la introducción en Estados Unidos de heroína procedente de Colombia. Ayer se supo que el citado "narco" se escondió en el citado municipio tinerfeño porque sabía que estaba siendo investigado en su país por policías norteamericanos y colombianos.

Fuentes del Instituto Armado comentaron ayer que John Mauricio "trató de quitarse de en medio", pues era consciente de que agentes de su nación lo estaban siguiendo por orden del departamento antidroga norteamericano (DEA).

Y viajó hasta Tenerife para huir de esa presión e intentar eludir su captura. Sin embargo la colaboración policial a nivel internacional propició su localización en el barrio adejero de La Postura hace pocos días.

Según fuentes de la Unidad Central Operativa (UCO), la labor del acusado consistía en "reclutar" a los "correos humanos" o mulas que después transportaban la heroína, adosada a su cuerpo o en el interior de su organismo, hasta Estados Unidos.

Las fuerzas de seguridad estiman que el ahora detenido residía en Tenerife desde hacía unos seis meses. Su asentamiento en el barrio de La Postura no es, ni mucho menos, casual. John Mauricio residía en una zona de Adeje que se caracteriza por un importante volumen de población inmigrante de diferentes lugares del mundo, pero donde los sudamericanos ocupan un lugar preponderante. Además, en La Postura existe un fenómeno de fuerte temporalidad de los residentes (no permanecen mucho tiempo en la misma zona). Es decir, que si no hubiese existido intercambio de información entre agentes norteamericanos, colombianos y españoles, a John Mauricio le hubiese resultado relativamente fácil pasar desapercibido en dicho enclave. La detención se produjo en un apartamento situado en la calle Viera y Clavijo, una de las vías principales de dicho núcleo.

El arresto fue desarrollado por agentes del Equipo contra el Crimen Organizado (ECO) de Tenerife, el Equipo de Huidos de la Justicia de la Guardia Civil, así como grupos centrales de investigación de la Unidad Central Operativa (UCO). La captura se produjo en el marco de la "operación Tafilete" a raíz de una orden procedente de un tribunal de Nueva York.

El amplio dispositivo se llevó a cabo en Colombia, España y Panamá. La investigación permitió desmantelar dos organizaciones criminales dedicadas al envío de partidas de heroína desde Colombia hasta Nueva York.

Una vez que los guardias civiles tuvieron conocimiento de la posible residencia en Canarias del requisitoriado, se llevó a cabo su intento de localización por apartamentos, urbanizaciones y zonas de ocio. Al final, los investigadores supieron que Mauricio vivía en un inmueble de la calle Viera y Clavijo, por lo que fue sometido a vigilancia hasta su captura. La organización a la que pertenecía adquiría la heroína en el departamento colombiano de Nariño y la trasladaba por vía aérea desde el aeropuerto internacional de El Dorado, en Bogotá, hasta Nueva York y Miami. Cada "mula" podía llevar entre uno y cuatro kilos de sustancia estupefaciente en cada viaje. De los 14 detenidos en total, 12 fueron capturados en Colombia, uno en Tenerife y otro en Panamá.

El arrestado fue entregado al Juzgado de Instrucción Número 4 de Arona, cuyo magistrado titular es Nelson Díaz Frías, que ordenó su ingreso en prisión hasta su extradición a Estados Unidos.