La nueva ordenanza de playas y piscinas, con una serie de prohibiciones y multas no aplicadas jamás, ha generado un gran malestar en los vecinos de Bajamar y Punta del Hidalgo, lo cual ha dado lugar a que los grupos políticos Sí se Puede y Por Tenerife hayan convocado asambleas. Dichas reuniones tendrán lugar en los centros ciudadanos a las siete de la tarde. La primera será en Bajamar, mañana, y la de la Punta del Hidalgo está prevista para el viernes.

"Que no puedo bañarme a la hora que desee como llevo haciendo toda la vida, que no puedo poner un sombrilla para protegerme del sol sino cuando lo diga la ordenanza y que no podré pasear por la costa con mi perro. Creemos que el ayuntamiento no actúa correctamente". Así de indignados se mostraron varios punteros con la nueva ordenanza, añadiendo: "No van a cambiar las costumbres de un pueblo que ha sabido conservar a la Punta".

Los portavoces de Sí se Puede y Por Tenerife (XTF) en el Ayuntamiento de La Laguna, Juan Miguel Mena y Nacho Viciana, advierten de que "es el pleno y no el concejal responsable de Servicios Municipales, Javier Abreu, quien puede introducir cambios en la ordenanza de playas y piscinas del municipio aprobada el pasado 14 de marzo por el Gobierno de CC-PSOE".

Ambos ediles aluden a que "Abreu ha anunciado modificaciones y cambios como si pudiera hacerlos por arte de magia, pero igual que fue el Pleno el órgano que aprobó esta ordenanza, es en pleno donde debe aprobarse o rechazarse las alegaciones que presenten los diferentes grupos políticos y la ciudadanía contra la misma. Así es que si Abreu reconoce, por fin, que los cambios son necesarios, en lugar de negarlo como había hecho en un principio, lo que tiene que hacer es presentarse alegaciones contra él mismo para que se discutan y se voten en el Pleno".

Los concejales de Sí se Puede y Por Tenerife dejan claro en todo caso que ellos sí presentarán alegaciones antes de que expire el plazo habilitado para ello, tras la publicación de la ordenanza en el Boletín Oficial de la Provincia, "porque no es verdad, como dice Abreu, que se trate de malas interpretaciones del texto, ni se ha realizado una lectura sesgada de la ordenanza, hemos leído lo que dice literalmente y es necesario presentar alegaciones para corregir este disparate".

Así que a los ediles no les vale que Abreu diga que su intención nunca fue prohibir, porque esta ordenanza prohíbe el baño antes de las 10:30 y después de las 18:00 horas en invierno o las 20:00 horas en verano, y sanciona cualquier infracción con una multa comprendida entre 750 y 1.500 euros.

También consideran que "no son ciertas sus declaraciones cuando dice que no hay horario para bañarse, solo establecemos un horario por el que los ciudadanos sabrán en qué momento y en qué lugar tendrán a su disposición el servicio de socorrismo y salvamento. Fuera de ese horario, la responsabilidad es de los ciudadanos".

Ambos grupos políticos consideran que Javier Abreu se "olvida de transcribir la segunda parte del artículo 19, en el que se recoge literalmente que quienes se bañen fuera del horario establecido lo harán sin perjuicio de la imposición de multa".

El concejal Javier Abreu no quiso hacer declaraciones, por el momento.