Sobraron los últimos cinco minutos. Y es que el Tenerife había hecho 88 minutos esplendorosos hasta que llegó el tanto de Osado, en el único disparo entre los tres palos del Hospitalet en todo el choque. Antes, los de Álvaro Cervera maniataron a su rival con una presión en campo contrario que dio muchos réditos. Luismi Loro, mediante un excepcional libre directo, Raúl Llorente, con un eslalon primoroso, y David Medina, con un golpeo preciso, habían hecho la diferencia que hubo entre los dos equipos a lo largo de todo el partido.

La extrema intensidad marcó los primeros minutos de juego. Las intenciones de unos y de otros se vislumbraron rápido: los visitantes intentaban llegar arriba por medio de buenas combinaciones en mediocampo; mientras que los locales pretendían robar arriba y buscar pases interiores a la espalda de la defensa. Sin embargo, el desequilibrio llegó a balón parado. Luismi Loro se perfiló y acarició un balón que llegó a rozar el meta Craviotto, pero que acabó en el fondo de las mallas (10''), ante el delirio de la grada. Se lanzó el Hospitalet a por el empate, mas lo que a punto estuvo de llegar es el tanto de Chechu (16''), después de otro robo. Cirio estuvo cerca de llegar a un balón que hubiera puesto en serios aprietos a Aragoneses (23''). Esa fue la más clara para los de Miguel Álvarez. Seis minutos después hubo un gol anulado a Aridane por un poco protestado fuera de juego. La ocasión más clara fue para Chechu a pase de Aridane. El ''7'' del Tenerife marró solo ante un Craviotto que cerró bien (32''). Los últimos minutos supusieron un respiro para ambos equipos. El Tenerife se hizo incluso con la posesión del balón, aunque dispuso de poca profundidad. Lo más importante fue la seguridad defensiva que transmitió el conjunto de Cervera en los primeros 45 minutos.

Tras el receso, el Tenerife arrancó nuevamente con fuerza. Chechu avisó, con un disparo que se le fue alto, y Llorente puso las cosas en su sitio. El enésimo robo en la salida del balón catalana sirvió para que el lateral se marcara una jugada de jugador de otro nivel para batir a Craviotto (54''). El tanto dejó KO al Hospitalet, si no lo estaba ya. Luismi Loro volvió a aplicar su medicina a balón parado, pero no fue tan efectiva como en la primera mitad (58''). En esas entró Suso para meter una marcha más al ataque blanquiazul. Llegó el carrusel de permutas y el partido perdió ritmo. Se activó con una jugada de Ayoze Pérez, cuyo balón cayó a los pies de David Medina en el borde del área; el catalán se disfrazó de pelotero y le dio un efecto al cuero para colar el balón por el palo largo de Craviotto (80''). El propio Ayoze intentó una chilena que se fue justo por encima del larguero (85''). Cuando ya el encuentro agonizaba, una maniobra de Cirio sirvió para Osado cruzase a gol con una gran volea (88''). El primer tiro entre los tres palos del Hospitalet supuso que se metieran en una eliminatoria que parece decantada para el Tenerife; no tanto por el resultado, como por la sensación de superioridad.