Al conductor novel se le reconoce por una de L de color blanco insertada en un rectángulo verde que se coloca en el cristal trasero de un coche. Los alumnos de la Escuela de Rock La Cuesta esperan obtener su L dentro de ocho meses.

Una decena de jóvenes laguneros forman la primera promoción de un centro de formación único en el Archipiélago. La lista se podría ampliar en dos o tres plazas dada la alta demanda de solicitudes que se han recibido. Javier Abreu, edil de Servicios Sociales y de Medio Ambiente y Participación Ciudadana, María José Castañeda, concejal responsable del Organismo Autónomo de Actividades Musicales y Cultura, y Mónica Martín, concejal de Promoción y Desarrollo Local, acudieron ayer al acto de apertura de un curso que se ha planteado como reto dar forma a dos bandas.

Emilio, Dani y Fran se encargarán de impartir lecciones de guitarra, batería y bajo dentro de una programación en la que también se han previsto clases de inglés para cantantes, conocimientos de las redes sociales o márquetin. "La idea es mostrar unos conceptos muy básicos de todo lo que rodea a este mundo, no solo de los aspectos musicales, sino de otros factores que inciden directamente en esta actividad", admitieron los impulsores de este proyecto.

El bajista Fran dice que los profesores "van a seguir un método de aprendizaje cronológico en el que se tocarán todas las vertientes del rock", precisa sin perder de vista que "uno de los objetivos que nos hemos planteados es que los alumnos acaben formando dos grupos que tengan posibilidades de tocar en vivo", desveló antes de confesar que "a pesar de recibir peticiones de otros municipios de la Isla, esta actividad es para jóvenes que residen en La Laguna".

Contar con unos conocimientos musicales previos no ha sido un argumento de peso a la hora de realizar la selección. "Lo importante es tener ganas, si no existe la voluntad de venir no eres bienvenido en un curso en el que nos vamos a divertir mucho", señaló Emilio en relación a la nómina de alumnos que forman parte de la Escuela de Rock La Cuesta.

Emilio, el encargado de desvelar algunos secretos de la guitarra, se muestra bastante ilusionado con la posibilidad de enseñar a sus alumnos que "a pesar de lo difícil que está la escena musical local no existe una sensación más gratificante que poder ganarte la vida con la música... Yo no vivo a cuerpo de rey, pero logro estas pequeñas recompensas", valoró.

Dani, por último, destaca que "lo deseable es que se genere un clima de aprendizaje y colaboración idóneo entre los profesores y los alumnos", puntualizó en el instante en el que incidió que no piensan ser "demasiado exigentes en las clases".

"La cultura del rock es pasárselo bien", prosiguió el batería antes de hacer una referencia a los británicos de Sex Pistols. "No sabían tocar bien, pero les pagaban para que no tocaran", revela Dani, no sin desmontar el viejo mito de que "cuando algo suena mal no siempre es culpa del batería... Eso es falso".