El portavoz de la Generalitat, Francesc Homs, afirmó ayer que el obstáculo para una consulta de autodeterminación catalana no es el marco jurídico, sino la "voluntad política". Según se recalca desde CiU, el gobierno regional está dispuesto al diálogo que ofrece el presidente Rajoy, pero no a renunciar a la consulta a los catalanes en 2014.

En rueda de prensa en la Generalitat tras recibirse la carta de Mariano Rajoy al presidente del Govern, Artur Mas, en que no acepta la consulta pero ofrece diálogo, Homs dijo que el Ejecutivo estudiará esa oferta de hablar porque se la toma seriamente, pero "no puede ser ingenuo", permitiendo que eso dilate el proceso hacia la consulta.

También replicó a Rajoy que "el principio de legalidad ha sido siempre el norte del Govern y del Parlament". En este sentido, recordó que la Declaración de Soberanía aprobada en la cámara catalana el 23 de enero incluía un punto encabezado precisamente por el principio de legalidad.

"Persistiremos en los argumentos legales", aseguró. Además, recordó que el Ejecutivo catalán ha constatado reiteradamente cinco vías legales para convocar la consulta, de manera que su convocatoria no depende de un debate sobre la legalidad, sino de la voluntad política.

Homs puso como ejemplo la voluntad de Londres al haber aceptado una consulta similar en Escocia, y dijo que esperaba de Rajoy una carta de respuesta "del estilo Cameron", el primer ministro británico. Sin embargo, la Generalitat sigue comprometida con la consulta, por lo que contactará en los próximos días con los grupos del Parlament para poner las bases que permitan convocarla en 2014.

También mostró decepción con la carta porque "tampoco es la respuesta a la altura de lo que el pueblo de Cataluña ha expresado" masivamente en la calle.