El lugar donde fue hallado el cuerpo de la niña de 12 años de origen chino Asunta Basterra, en una pista forestal en las afueras de Santiago, ha recibido hoy, día en que hubiera cumplido 13 años, los juguetes y flores de quienes la recuerdan y han querido con este gesto improvisar un pequeño altar en su memoria.

Un tigre de peluche, dos angelitos, un molinillo de viento, velas y dos ramos de flores blancas han sido depositados en el lugar exacto en el que dos viandantes encontraron el cuerpo sin vida de la niña el pasado domingo.

La pista pertenece al municipio de Teo (A Coruña) y discurre paralela a la carretera AC-841, próxima a Santiago.

Los padres de Asunta, Rosario Porto y Alfonso Basterra, que la adoptaron cuando apenas tenía un año, están en prisión desde el pasado viernes por un presunto delito de homicidio.