Aena ha denunciado "todos los capítulos" del II Convenio Colectivo de los controladores aéreos, dictado mediante laudo arbitral en febrero de 2011, y ha pedido al USCA que "acredite su representación como sindicado designado" para empezar a negocial el nuevo texto a partir del próximo mes de enero.

Según han informado fuentes del sector aéreo, Aena comunicó a los controladores la denuncia del actual texto que rige su actividad laboral el pasado 23 de octubre recordando al colectivo que la fecha de finalización del II Convenio Colectivo es el 31 de diciembre de 2013.

Aena propone a USCA (Unión Sindical de Controladores Aéreos) iniciar la negociación del nuevo texto el 21 de enero de 2014, apuesta por una vigencia de 3 años y señala que las materias negociables son "todos los capítulos del actual Convenio".

Entre ellos destacan los relativos a la "selección, contratación e ingreso; el régimen disciplinario; la jornada laboral y los descansos; las vacaciones, permisos y licencias; las retribuciones y el sistema de promoción profesional".

Las fuentes han explicado que la comunicación de Aena ha sido acogida con "inquietud" por el colectivo de controladores y el sindicato USCA, al que están afiliados un 90 % de los profesionales del control.

En la actualidad en España hay unos 2.400 controladores, de los que 1.800 trabajan en torres o centros de control y el resto se encarga de labores de formación, planificación y gestión.

El II Convenio Colectivo de los controladores fue dictado mediante laudo arbitral por Manuel Pimentel el 27 de febrero de 2011, poniendo fin a más de un año de conflictividad social, que se inició en febrero de 2010, dos días después de que se cerrase sin acuerdo la negociación del texto.

El 5 de febrero de 2011 el Consejo de Ministros aprobó un decreto ley que devolvía a Aena la capacidad de gestión y control del tráfico aéreo y en abril una ley estableció una nueva organización del trabajo de los controladores y rebajó sus salarios.

En julio el Ejecutivo aprueba un nuevo decreto que regula la jornada del colectivo, en medio de las acusaciones por provocar retrasos a los controladores de las compañías aéreas.

El conflicto entre Aena y los controladores no cesa durante 2010 y llega a su máximo punto el 3 de diciembre, con la ratificación de un nuevo Real Decreto que limita a 1.670 el máximo de horas que pueden realizar los controladores de tránsito aéreo.

En protesta por la decisión del Gobierno, los controladores abandonan masivamente sus puestos de trabajo, según el Ministerio de Fomento, presidido por José Blanco, por lo que se decreta el cierre de los espacios aéreos del aeropuerto de Barajas, de Baleares, Canarias y Galicia.

Este hecho dejó en tierra a cientos de aviones y a más de 600.000 pasajeros durante el puente de diciembre

USCA niega la acusación de Fomento y sostiene que el cierre del espacio aéreo fue una decisión evitable e imputable a decisiones voluntarias de los responsables de Aena.

El sindicato pone de manifiesto que en la conducta de los controladores aéreos no hubo comportamiento alguno de abandono, ni físico ni funcional, ni individual ni colectivo y recuerda que en varios de los procesos judiciales abiertos contra los controladores "se está poniendo de manifiesto la realidad y muchas de las sanciones impuestas por Aena a los controladores ya han sido revocadas".