La banca española cerrará el 20 % de sus sucursales hasta 2015, el doble que la banca alemana y cuatro veces más que la francesa, debido a la caída de los ingresos y las políticas de contención de gastos.

Según los datos de un estudio de la consultora Roland Berger difundido hoy, el 80 % de los directivos de banca consultados prevé rentabilidades por debajo del 10 % en 2015 y caídas de resultados o una evolución inferior al 2 %.

Sin embargo, en España la realidad bancaria muestra un comportamiento "diferente y alentador", ya que dos tercios de los directivos entrevistados esperan un crecimiento del resultado neto bancario hasta el 2 % y un 17 % adiciones cree que el aumento será mayor entre 2013 y 2015.

Aún así las previsiones apuntan hacia el cierre de un número de oficinas mayor que en otros países europeos por la dificultad para mantener el ritmo de ingresos y la escasez de productos que generen comisiones.