Transporte, limpieza, jardines, policía, infraestructuras, sanidad... Nada de eso tiene una valoración positiva en Barranco Grande. Al menos así lo transmitió la asociación El Molino, cuya presidenta, Ana María Concepción, mantuvo un encuentro con el parlamentario regional Ignacio González (CCN). "En Barranco Grande queremos ser tratados como lo es Añaza, tener lo que tienen ellos", se escuchó durante la reunión en tono de "envidia sana". "Añaza para ustedes es un lujo", sentenció el también candidato a la Alcaldía.

Con unas 9.000 personas por censo, esta localidad del Suroeste fue insistente al exponer su "cansancio y hartazgo" por la "desatención" que sufre desde hace varias legislaturas. "Contamos con los servicios más caros del mundo, puesto que estamos pagando por algo que no se nos da", apuntó Ana María Concepción.

Haciendo autocrítica, admiten que la asociación "no se ha caracterizado por ser demasiado conflictiva" al demandar la atención de la administración por "respetar el estado de emergencia". A esa actitud atribuyen que el lugar reciba "un trato diferente, en el mal sentido, en comparación con muchísimos barrios que sí han sabido ser reivindicativos". Para Concepción, "pensar que el ayuntamiento nos daría lo que en justicia nos pertenece sin reclamarlo de forma aireada fue una quimera".

Un ejemplo: "Llamo a la Policía Local porque un coche obstruye la puerta de mi garaje y me dicen que no vienen porque estamos en la periferia". Otro ejemplo: "Pedimos bandas sonoras para las calles perimetrales del colegio y para la calle Barranco Grande y cuando, por fin, existe normativa, hacen caso omiso y sí las colocan en otros barrios colindantes".

Falta de personal de limpieza en la localidad, baldeos "esporádicos" y "en determinadas calles"; carencia de efectivos policiales en función de la demanda de la localidad; un deficiente servicio de guaguas desde la reestructuración de las líneas, haciendo que los vecinos usuarios pierdan tiempo y dinero en sus desplazamientos obligatorios (hasta tres transbordos para acudir a un hospital)" y hasta calles sin asfaltar son parte de la lista de deficiencias que hace de Barranco Grande un lugar infradotado.

La directiva de la asociación está cansada y muestra su disposición a abandonar.