Sus altezas reales los príncipes de Asturias han aceptado el ofrecimiento hecho por el alcalde de Santa Cruz, José Manuel Bermúdez, para presidir el acto inaugural del Palmétum, considerado como el nuevo jardín botánico de la ciudad. Aunque no ha trascendido aún la fecha oficial del acto, y pese a que se consideran necesarias previamente las obras del plan de autoprotección, las fuentes consultadas aseguraron que el evento tendrá lugar "en breve".

Este jardín botánico cuenta con unas 1.400 especies vegetales y se yergue sobre la costa de Santa Cruz, alzándose como la única montaña ajardinada de la ciudad. Posee abundantes miradores con espléndidas vistas al mar, a la ciudad y a la cordillera de Anaga. En sus jardines crece una admirable colección de palmeras de toda Europa bañadas por riachuelos, lagos y cascadas. Su gestión está encomendada a la sociedad Parque Marítimo, si bien el consistorio anunció que ejercerá de supervisor y coordinador.

El 27 de septiembre fue abierto este espacio para la realización de visitas guiadas por sus 112 hectáreas dotadas de una vegetación espectacular, fruto de colaboraciones entre numerosas instituciones de todo el mundo realizadas a lo largo de tres décadas. Constituye un espacio verde dotado de varias estructuras, entre ellas el edificio de entrada, con un ascensor para acceder a la montaña; un museo etnográfico, edificio semienterrado de unos 1.000 metros cuadrados; el octógono, un umbráculo de 2.300 metros cuadrados, y un complejo sistema de cascadas, ríos y lagos.

El Palmétum de Santa Cruz constituye un proyecto único en el mundo, que ha transformado un vertedero de basura urbana en un espacio natural, la montaña de Lazareto, cerrado en el año 1983. Las obras que se llevaron a cabo desde 1991, año en el que fue redactado el proyecto, han supuesto un coste de alrededor de 10 millones de euros, financiados por fondos europeos y estatales dentro del marco conjunto del Parque Marítimo y Palmétum.

El proyecto es una idea original de Manuel Caballero, con la colaboración de José Timón.