El concejal de Fiestas del Ayuntamiento de la capital tinerfeña, Fernando Ballesteros -único edil del CCN en la Corporación-, comunicó al promotor gaditano de la reedición del hermanamiento entre los carnavales de Tenerife y Cádiz, Agustín Rubiales, la imposibilidad de celebrar el reencuentro al término de la fiesta de la máscara chicharrera por problemas de agenda, a la vez que le ha planteado reubicarlos en el calendario después de verano, posiblemente en el mes de octubre. Así lo confirmó el edil de Fiestas, Fernando Ballesteros, a EL DÍA, quien confirmó que mantuvo una conversación con Rubiales para continuar con el proyecto de la reedición del hermanamiento que se hizo por primera vez en el año 1984. La decisión del concejal del CCN facilitará que la murga ganadora en el apartado de Interpretación del concurso que se celebrará el viernes 14 de febrero pueda participar sin problemas en el Encuentro de Murgas de Candelaria. Cabe recordar que la reedición del hermanamiento entre los carnavales gaditano y chicharrero contemplaba que la murga que se alzara con el primero de Interpretación viajara el sábado 15 de marzo a Cádiz, con motivo del hermanamiento que se escenificaría en la Tacita de Plata. De haberse celebrado, la murga ganadora se enfrentaba al conflicto de renunciar al encuentro de Candelaria para viajar a Cádiz.

Mientras la reedición del hermanamiento entre Cádiz y Tenerife estaba previsto para el sábado 15 en la Tacita de Plata, la delegación gaditana tenía previsto viajar a la Isla el sábado siguiente, día 22 de marzo. La diferencia entre ambas delegaciones estriba en que mientras Tenerife tenía previsto integrar su representación con la reina proclamada el miércoles 26 de febrero y la murga y la comparsa ganadora, los gaditanos apostaban por enviar como representación a su comparsa, chirigota y coro más veteranos. A partir de ahora la organización deberá replantear el hermanamiento para después de verano, en octubre.