Las declaraciones de Carlos Soler recogidas por El Día dieron "vueltas" la semana pasada, llenando días después páginas también de otros medios, pero sigue sin aclararse si el temor del profesor e ingeniero sobre el enfriamiento del agua de la Fuente Santa está o no fundamentado.

El propio vicepresidente del Cabildo de La Palma y responsable de Aguas, Carlos Cabrera, ha tenido que recurrir al instituto nacional de minas para buscar una respuesta irrefutable. Ya tiene el informe del Consejo Insular, que tal y como adelantó el jueves este periódico rechaza la opinión de Carlos Soler, pero el veterano político sabe del enfrentamiento entre los técnicos "locales" y lo que quiere es un estudio objetivo, cuyas conclusiones no den margen alguna a la duda.

Esta redacción ha querido conocer además la opinión del ingeniero de minas Herminio Torres, que estuvo durante un año en las obras de la Fuente Santa. También trabajó en galerías de México, Colombia, Ucrania o incluso en Siberia.

Torres desconoce a qué temperatura se encuentra el agua de la galería y si realmente sus propiedades se han visto afectadas, "es algo de lo que no puedo hablar porque lo desconozco", pero sí tiene claro que "meter una tubería de 800 milímetros como se ha hecho para la refrigeración de esta galería es una barbaridad".

El experto ingeniero aclara que "una cosa es hacer visitable la Fuente Santa y otra muy diferente es que la gente pase frío allí dentro", advirtiendo de que "cuando estábamos trabajando en la galería pusimos una tubería de 300 milímetros que era más que suficiente y, para ello, tuvimos en cuenta tanto el personal que estaba trabajando como los gases de los explosivos que se utilizaban y las dimensiones de la galería, entre otros condicionantes".

Herminio Torres afirma que con poner una refrigeración de las mismas dimensiones que la utilizada para la obra "es más que suficiente para hacer la Fuente Santa visitable, pero hay que saberla poner. No es una galería recta sino que tiene las balsas a derecha e izquierda. Entonces, de la tubería principal hay que ir poniendo baipás y, sobre todo, habría que controlar el tema de los gases. No es tan fácil. La Fuente Santa tiene que tener una temperatura que la gente entre de la calle y pueda hacer la visita sin ningún problema. Quizás no calcularon bien. El diámetro es excesivo porque enfría demasiado y no me extraña que se haya enfriado el agua".

Para este experto es sencillo comprender que "si estás ambientando con un caudal y un aire demasiado frío es lógico que baje la temperatura de todo lo que haya en la galería. No hace falta ser brujo ni minero para saberlo. Es algo palpable".

Herminio Torres reconoce que "yo con Carlos Soler tuve mis cosas (diferencias) en el trabajo de la Fuente Santa. Lo tuve que traer a Asturias para que viera cómo se tenían que hacer las cosas en una mina", pero reconoce que "sobre agua tiene grandes conocimientos. Posee una valía asombrosa y su opinión hay que tenerla muy en cuenta". Eso sí, "aunque el agua se haya enfriado es recuperable seguro, de todas todas, pero haciendo las cosas bien. Yo siempre digo que zapatero a su zapato para evitar barbaridades".