Josep Maria Bartomeu, nuevo presidente del FC Barcelona tras la dimisión de Sandro Rosell, ha asegurado hoy que no solo piensa agotar el mandato hasta la primavera de 2016, sino que su intención es presentarse a las próximas elecciones.

"No voy a entrar a analizar unas posibles elecciones en junio, porque no habrá elecciones", ha manifestado tajante Bartomeu en su primera rueda de prensa como máximo mandatario de la entidad azulgrana.

Sereno, optimista y más relajado y distendido con el paso de los minutos, Bartomeu ha desgranado toda la actualidad del club catalán en una comparecencia que ha durado dos horas y en la que ya había adelantado que contestaría a todas la preguntas que le hicieran los periodistas.

"Hemos pensado que lo mejor para el Barça es que nosotros continuemos hasta 2016. Hasta ahora, nuestro balance es de notable alto, tenemos un proyecto por nuestro club y retos importantes, como la reforma del Camp Nou, las construcción de un nuevo Palau Blaugrana y el ''Espai Barça. Esto solo es un punto y seguido", ha explicado.

Bartomeu no solo agotará su mandato, sino que ha adelantado su intención de concurrir "como número uno" a los próximos comicios si sus compañeros de junta, que escuchaban la comparecencia del nuevo presidente desde las primeras filas de la sala de prensa, le dan su apoyo. "La idea es cumplir un segundo mandato. Esa también era la idea de Sandro, la de presentarse a la reelección", ha añadido.

El nuevo presidente del Barça incluso ha asegurado que no dimitirá aunque la querella presentada contra Rosell por apropiación indebida en modalidad de distracción se extienda también a su persona y a la del vicepresidente económico, Javier Faus, igualmente firmantes de algunos contratos con el jugador.

"Que haya una querella no quiere decir que hayamos hecho nada mal. Los contratos de la operación Neymar están revisados por abogados de prestigio y no tenemos ninguna duda de que todo es correcto. Si el señor (Jordi) Cases, nos amplía la querella a nosotros, no pensamos dimitir de ninguna manera, y si nos imputan tampoco dimitiremos", ha asegurado.

Bartomeu incluso se ha mostrado comprensivo con Cases, el socio demandante, de quien ha dicho que "ha hecho una cosa", fiscalizar la gestión de la junta, que él también hubiera hecho en un momento dado: "¿Llamarlo? Sí, por qué, no. Y de manera cordial".

Además, ha negado que Rosell hubiese dimitido por la famosa querella pues, de momento, ni siquiera ha sido imputado. "Sandro ya explicó ayer sus motivos, que son personales, relacionados con la seguridad de su familia y otras cosas privadas", ha recordado.

Sobre su amigo Rosell ha subrayado que lo ha visto "disfrutar mucho" durante estos años, "pero en los últimos días también lo he visto sufrir mucho".

"Sandro es un activo del club desde 2003 y una de las cinco personas que más sabe de fútbol" ha destacado Bartomeu, quien ha indicado que, más adelante, cuando la situación institucional se estabilice, "le pediremos consejo".

Igualmente se ha mostrado conciliador con Johan Cruyff, enemigo declarado de Rosell y que renunció a ser presidente de honor cuando aquél se puso al frente de la entidad: "Cruyff es un mito del barcelonismo. Me encantaría poder llamarle".

Con esta maratoniana rueda de prensa, Bartomeu daba por concluida una dura jornada en la que ha empezado a estrenar su nuevo cargo a la diez de la mañana, cuando se ha trasladado hasta la Ciudad Deportiva Joan Gamper para visitar a la primera plantilla.

"Les he animado a que se centren en la competición. En este esprint final de la temporada", ha explicado Bartomeu, quien ha pedido al socio que siga confiando en la junta pese a la marcha de Rosell.

"Somos un equipo de hombres y mujeres honestos y justos, y que casi siempre priorizamos los intereses del club a nuestras familias y a nuestros deberes profesionales", ha concluido el nuevo presidente del FC Barcelona.