Lo que empezó siendo un programa pionero está creciendo cada día, pues son más los colegios y los padres y madres que se implican en dedicar horas de forma desinteresada a mejorar la seguridad vial en los colegios del municipio.

En este sentido, la Policía Local formaba ayer a 5 voluntarios del colegio Camino Largo y 8 de La Salle, ya que el proyecto ha sido impulsado por la concejalía de Seguridad Ciudadana, que dirige José Alberto Díaz, en colaboración con el área de Educación, con Cruci Díaz al frente. Los dos ediles unidos para la mejora de la seguridad vial en los entornos de los centros educativos del municipio. Además es un proyecto socioeducativo, pues los niños aprenden a convivir en los entornos escolares y a ven cómo sus padres y familiares se involucran en un tema tan relevante como es la seguridad ciudadana.

Los colegios que están dentro del programa y el número de voluntarios son: Las Dominicas (12), San Bartolomé de Tejina (5), San Benito (5), Camino La Villa (11), Princesa Tejina (3), Luther King (6), La Pureza (25), y Buen Consejo (12). A estos hay que añadirles los dos citados que ayer estaban recibiendo formación de la Policía.

Para hacer realidad este proyecto han tenido que pintar nuevos pasos de peatones y apeaderos donde antes no había dicha señales, con el correspondiente disco que anuncia el proyecto y el horario en el que no se debe estacionar el vehículo.

Una de las voluntarias es Myriam Bautell, de 45 años de edad, y pertenece al colegio Buen Consejo. Informó de que en la actualidad la vigilancia corresponde a 2 hombres y 9 mujeres. Destacó que muchos de ellos trabajan, por lo que restan tiempo de sus tareas laborales para velar por la seguridad de los escolares, concretamente de 8:25 a 9:00 horas.

Myriam destacó la experiencia en los siguientes términos: "Acércame es importante, sobre todo porque es gratificante ver cómo el niño, al aproximarse al colegio, se despide del padre o la madre para acudir a nosotros, ya que hay confianza y cariño. Es un programa de responsabilidad, gratifica el garantizar la seguridad del menor y alienta la confianza que deposita los padres en los voluntarios. Y por si fuera poco, los padres nos conocemos mucho más que antes".