El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, anunció ayer que los empresarios que a partir de ahora hagan nuevos contratos indefinidos abonarán una tarifa plana de 100 euros al mes en cuotas a la Seguridad Social. Esta medida permitirá la contratación de un trabajador de manera indefinida y pagar los 100 euros en cotizaciones por contingencias comunes durante los dos primeros años, siempre que aumenten la plantilla. La otra medida anunciada ayer es que desde 2015 quienes ganen menos de 12.000 euros al año no pagarán el IRPF.

Son las dos principales medidas que llevó ayer Rajoy al debate del estado de la nación, que se ha centrado en un "cambio de rumbo" económico que el jefe del Gobierno resumió con un símil geográfico: "Hemos atravesado con éxito el cabo de Hornos".

Con la imagen del paso por uno de los cabos más peligrosos del mundo, en la parte más austral de Sudamérica, Rajoy ejemplarizó la "gran noticia" de que ya no se camine "hacia la ruina", como hace dos años, sino que "asome la recuperación".

De hecho, confirmó que se revisarán al alza las previsiones de crecimiento del PIB hasta el 1% en 2014 (con lo que ya habrá empleo neto) y el 1,5% en 2015, tres décimas más de lo estimado hasta ahora en ambos ejercicios.

En un discurso que tuvo como eje principal el problema del paro, una de las principales medidas anunciadas fue que "a partir de este momento" se pone en marcha una tarifa plana de cotización a la Seguridad Social de 100 euros durante 24 meses para la contratación indefinida de nuevos trabajadores.

Esta rebaja de cotizaciones se aplica a empresas y autónomos independientemente de su tamaño y a trabajadores de cualquier edad.

Supondrá un ahorro de cerca de 75% de la cotización por contingencias comunes, lo que, aplicado a un sueldo bruto anual de 20.000 euros, implica que el empleador se ahorrará 3.520 euros anuales de cotización a la Seguridad Social por cada nuevo empleo creado.

Por ello Rajoy lo definió como "el impuesto a la creación de empleo neto más importante de nuestra historia".

Las empresas que se beneficien de esta medida no habrán podido realizar despidos colectivos ni individuales improcedentes en los seis meses anteriores a la firma de los nuevos contratos.

También deberán estar al corriente de sus obligaciones tributarias y con la Seguridad Social.

En cuanto a la próxima reforma fiscal, anunció que los contribuyentes que ganen menos de 12.000 euros al año no pagarán el IRPF a partir de 2015.

Fuentes de Hacienda incidieron en que esta cifra no se puede comparar con ningún mínimo actual y añadió que se podrán beneficiar de ella alrededor de un millón y medio de contribuyentes.

Asimismo, señaló que se trata de una decisión política que debe encuadrarse dentro de la reforma fiscal e indicó que con ello se quiere trasladar el mensaje de que los "mileuristas" no pagarán este impuesto.

Por otro lado, Rajoy anunció que el próximo viernes se aprobarán cambios normativos para mejorar la liquidez empresarial y fortalecer la financiación no bancaria para pymes.

Así, se establecerá una obligación de preaviso de las entidades financieras, de al menos tres meses, cuando se vaya a cancelar o reducir "notablemente" la financiación de las pymes.

También se pondrá en marcha la denominada "ley ascensor" para que una empresa que vaya ganando tamaño pueda acceder a formas de financiación "cada vez más sofisticadas", como fondos de inversión, el mercado alternativo bursátil o la bolsa.

Además se incluirá una reforma de la normativa concursal para facilitar que las empresas con viabilidad reestructuren su deuda "cuanto antes".

Por su parte, el líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, quiso desmontar ayer el triunfalismo del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, al que acusó de vivir en otra realidad y culpó de aumentar la desigualdad utilizando la crisis como "coartada" para aplicar el programa "en B" del PP.

En el "cara a cara" entre ambos en el Congreso, Rubalcaba trató de rebatir las razones para el optimismo que ve Rajoy en el horizonte y que llevaron a preguntar al jefe del Ejecutivo: "¿En qué país vive usted?".

Unas palabras que arrancaron un estruendoso aplauso de la bancada socialista, pendiente de lo que decía su secretario general, que subió a la tribuna solo con dos folios y un esquema de todo lo que quería decir.

Rubalcaba, según fuentes socialistas, intentó llevar al hemiciclo la voz de los españoles que están "sufriendo" las políticas del Gobierno de Rajoy y para quienes lo peor de la crisis está todavía por llegar.

Durante su réplica, Rajoy, entre otras cuestiones, pidió al líder de la oposición, Alfredo Pérez Rubalcaba, que le explique la razón por la que el PSOE convirtió a España en el tercer país más caro en materia energética.

Igualmente, le reclamó una explicación sobre la regulación que puso en marcha el PSOE que elevó el déficit tarifa en una cuantía de 10.000 millones al año y que provocó, al mismo tiempo, incrementos de la tarifa de la luz de un 7% de media cada ejercicio.

"¿Puede explicármelo?. ¿A quién beneficiaba eso?", espetó a Rubalcaba, que no quiso entrar en esta cuestión y se limitó criticar la labor del Gobierno en otras materias.

El coordinador federal de IU, Cayo Lara, pidió la dimisión de Rajoy, porque cree que España "no se merece un Gobierno en B" que ganó las elecciones "dopado con fondos ilegales", vulnera sus promesas electorales y además "roba el alma social" a la Constitución.

"A esta Constitución ya no la reconoce ni la madre que la parió", denunció el líder de IU durante su intervención en la que rebatió todas las reformas puestas en marcha por el Gobierno y con las que, según denunció, "se está retrocediendo a pasos agigantados en los derechos de la ciudadanía".

Se dirigió en su discurso "a la España real" que sufre la situación económica del país, ciudadanos "que no son como esos a los que se les llena la boca de patria y luego esconden su dinero en paraísos fiscales. Por cierto, señor Rajoy, dígales a algunos de sus compañeros que Suiza no es una comunidad autónoma", ironizó.

El representante de IU, pidió, además, que cese de sus funciones al ministro del Interior, Jorge Fernández Día, por su gestión al frente de la crisis de la tragedia de Ceuta (en la que murieron 15 inmigrantes al intentar nadar a territorio español por mar el pasado día 6 de febrero), calificándola de "nefasta".

En la primera parte de su réplica, Rajoy instó a Lara, a reconocer que no todo es tan "nefasto" como aseguró porque eso le daría credibilidad, y consideró "inaceptables" críticas como la de que está a las órdenes de los poderosos y que liquida los derechos humanos. En cuanto a la petición de destituir a Fernández Díaz, Rajoy, aseguró que no piensa cesar al titular de Interior, porque "es un excelente ministro".

En otro orden de cosas, el portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran i Lleida, acusó al presidente de impulsar medidas que estimulan más el titular que la eficacia, como hizo en materia laboral y con el tema de los desahucios, al tiempo que le reprochó que se haya olvidado de las personas.

Rajoy respondió que el Estado de bienestar es "irrenunciable" y que intentará garantizar su supervivencia y su mejora a pesar de que la situación económica sea difícil.

La portavoz de UPyD en el Congreso, Rosa Díez, acusó a Rajoy de "soberbia" y "prepotencia", después de que éste ironizara con la "mano" que le había tendido Díez para salir de la situación de crisis en España.