El Senado retomará mañana, lunes, los trabajos de reforma de las funciones y el sistema de elección y composición de la institución, en los que el PP estaría dispuesto a admitir una modificación "blanda" de la Constitución, que se limite a cambiar las competencias y siempre que haya un consenso claro.

A priori, el PP dice que acude a la negociación sin marcar "líneas rojas", pero sí advierte a los nacionalistas que no aprovechen, "como ocurrió en otros intentos de reforma", que "el Pisuerga pasa... para poder conseguir algunos otros objetivos".

Por otra parte, los populares hicieron hincapié de cara a los socialistas que no comparte su propuesta federalista de Senado al estilo del Bundesrat alemán.

Según el secretario general del Grupo Popular en el Senado, Antolín Sanz, la voluntad de su formación es que la "ansiada" reforma de la Cámara Alta vea la luz de una vez, algo en lo que está de acuerdo el resto de grupos.