El 12 por ciento de la operaciones de cirugía estética que se realizan en España corresponde a pacientes masculinos, frente al 88 por ciento de mujeres, ha informado hoy la Sociedad Española de Cirugía Plástica Reparadora y Estética (Secpre).

De estas intervenciones, la más demandada, por casi el 60 % de los hombres, es la cirugía facial, y dentro de ella la de párpados y la de nariz, pues los varones consideran que la caída de los párpados superiores, las ojeras o las bolsas son los factores que provocan una imagen más envejecida y cansada.

En cuanto a las rinoplastias, muchas se hacen por motivos estéticos aunque los hombres también aluden a problemas de otra índole como traumatismos o insuficiencias respiratorias.

La segunda técnica más solicitada es la liposucción, que se realizan uno de cada cuatro pacientes, principalmente en el abdomen, los costados, la papada y las mamas, las zonas de acumulación de grasa más "rebeldes" a las dietas y al ejercicio físico.

La Secpre ha comprobado que los hombres, pese a ser la minoría, se muestran más fieles a sus intervenciones a pesar de las dificultades económicas derivadas de la crisis, mientras que las mujeres han hecho variar sus preferencias a la hora de someterse a una intervención.

Según su presidente, Miguel Chamosa, "en tiempos de crisis ellos se están mostrando menos proclives a renunciar por motivos económicos a la intervención que desean o necesitan".

Por el contrario, las mujeres están optando por el momento a retoques "menores", como la corrección de arrugas, que suponen cirugías menos invasivas, requieren menos tiempo de postoperatorio y, lógicamente, tienen un coste inferior.