La Concejalía de Hacienda del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife iniciará antes de que acabe el mes de abril una campaña de inspección fiscal que se centrará en las grandes empresas con sede en la capital y que revisará la adecuación del Impuesto de Actividades Económicas (IAE) y del impuesto sobre la basura respecto a los conceptos reales.

Con esta medida el ayuntamiento prevé recaudar alrededor de tres millones de euros que ya han sido consignados en los presupuestos.

Según explica el responsable de Hacienda, Alberto Bernabé, no se trata de abrir una caza contra el defraudador sino simplemente ajustar la realidad fiscal a la económica.

"Creemos que hay un porcentaje de error alto que no se corresponde con una mala voluntad del empresario. No siempre se trata de la picaresca de las empresas para pagar menos, aunque también lo hay, sino que también hay un elevado porcentaje de error porque no están bien configurados los padrones, por eso queremos hacer una revisión de ese segmento y creemos que de esa inspección puede salir una recaudación de tres millones de euros", detalló el edil.

En concreto, esta campaña de investigación estará dirigida sobre todo a las grandes empresas, que son aquellas que facturan más de un millón de euros al año, y entre las que se encuentran por ejemplo hoteles, bancos, fábricas, centros comerciales e incluso la Refinería de Cepsa.

"No hacemos eso porque no estén pagando, porque sí que lo hacen en función de su facturación, sino porque queremos revisar que los conceptos por los que pagan están bien dados de alta. Si es un hotel, por ejemplo, se paga en función de la actividad, del número de camas, de la superficie y eso se va a revisar para saber que están los impuestos bien configurados y que estén pagando adecuadamente", abundó.

Respecto a lo elevado de la cifra que se prevé recaudar, Bernabé explica que "si se detecta un error en la liquidación de un impuesto, el ayuntamiento puede acudir hasta cuatro años atrás, por eso no son tres millones que se han podido defraudar en 2013 sino que se puede calcular desde 2010".

La campaña será aprobada el próximo mes y se desarrollará durante todo el año. La dirigirá el tesorero municipal, Alejandro Rodríguez, y es que el Plan de Inspección Fiscal lo debe aprobar el tesorero y no el concejal.

Además, los encargados de las inspecciones serán los propios funcionarios municipales, que, por otro lado, estarán más liberados, debido al aumento de la domiciliación de los pagos de impuestos, que previsiblemente disminuirá la necesidad de que haya personal en ventanilla.

Respecto a la valoración hecha por el Grupo Municipal Popular sobre esta medida asegurando que no era el momento adecuado porque "parece un castigo a los empresarios justamente ahora que están en una situación en la que necesitan el máximo apoyo institucional", Alberto Bernabé aseguró que "es un obligación legal, social y constitucional pagar los tributos, se sea quien se sea".

"El concepto de equidad fiscal es que cada uno debe pagar lo que le corresponde, por eso paga más el que más tiene, y sirve para que nadie tenga que pagar más porque algunos no pagan. Las reglas del juego en este país son las mismas para todos y el IAE es igual aquí que en Cuenca. Decir que pagar lo que deben es castigar a la empresa o que es un mal mensaje a las empresas que se pueden instalar en Santa Cruz es inaudito y que venga de un representante político aún más censurable", sentenció el edil de Hacienda.