Investigadores de los centros oceanográficos de Canarias, Málaga, Cádiz y Baleares del Instituto Español de Oceanografía y de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), a bordo del buque oceanográfico Ángeles Alvariño, regresaron el pasado domingo a Tenerife después de concluir la última de las campañas del proyecto VULCANO para investigar el estado del volcán submarino de la isla de El Hierro.
Los investigadores recogieron durante 20 días 23 millones de registros de variables oceanográficas, 600 litros de agua analizada, realizaron una nueva batimetría del volcán en 3D, tomaron más de 36 horas de grabación submarina y lograron recuperar la boya, instalada hace unos meses, y que había resultado estar hundida a 200 metros de profundidad.
Tras el análisis preliminar de las muestras recogidas alrededor de toda la isla de El Hierro, los investigadores afirman que las aguas herreñas se encuentran en perfecto estado de salud. A excepción de una pequeña área con radio 200 metros alrededor del cráter principal del volcán submarino, no se han registrado anomalías significativas en ningún punto de la periferia de la isla desde la superficie del océano hasta los 1200 metros de profundidad.
La delimitación del área sobre el volcán submarino, donde aún a día de hoy la fase de desgasificación continua activa, se ha podido realizar tras el procesado de los datos recogidos por dos nuevos sensores prototipo instalados en la roseta y suministrados por la Agencia Federal de Estados Unidos NOAA (National Oceanic and Atmospheric
Administration) gracias a dos convenios, firmados uno con el IEO y otro con la ULPGC.
A falta de un análisis final de los datos batimétricos, el nuevo mapa en 3D realizado sobre el volcán submarino muestra que el cráter principal del edificio volcánico se encuentra a la misma cota que en marzo y octubre de 2013, 88 metros con respecto a la superficie.
Además, gracias al ROV Liropus 2000 del Instituto Español de Oceanografía, se han tomado imágenes de alta resolución del edificio volcánico submarino, mostrando la rápida tasa de recolonización del ecosistema marino.
VULCANO (Volcanic eruption at El Hierro Island. Sensitivity and Recovery of the Marine Ecosystem), es un proyecto de investigación del Plan Nacional, financiado por el Ministerio de Economía y Competitividad y fondos FEDER. Está liderado por el Centro Oceanográfico de Canarias del Instituto Español de Oceanografía (IEO) y colaboran La Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, La Universidad de La Laguna, el Banco Español de Algas y el Museo de la Naturaleza y el Hombre de Tenerife. El objetivo principal es caracterizar la variabilidad espacio temporal de las propiedades físico-químico-geológicas y biológicas de toda la periferia de la isla de El Hierro desde superficie hasta los primeros 2000 metros de la columna de agua. VULCANO está liderado por el científico titular del Centro Oceanográfico de Canarias Eugenio Fraile, que a su vez ya había liderado las anteriores campañas Bimbache en la isla de El Hierro.
El Instituto Español de Oceanografía (IEO), es un organismo público de investigación (OPI), dependiente de la Secretaria de Estado de Investigación, Desarrollo e Innovación del Ministerio de Economía y Competitividad, dedicado a la investigación en ciencias del mar, especialmente en lo relacionado con el conocimiento científico de los océanos, la sostenibilidad de los recursos pesqueros y el medio ambiente marino. El IEO representa a España en la mayoría de los foros científicos y tecnológicos internacionales relacionados con el mar y sus recursos. Cuenta con nueve centros oceanográficos costeros, cinco plantas de experimentación de cultivos marinos, 12 estaciones mareográficas, una estación receptora de imágenes de satélites y una flota compuesta por siete buques oceanográficos, entre los que destaca el Cornide de Saavedra, el Ramón Margalef y el Ángeles Alvariño. El Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) y, en particular, el Programa Operativo de I+D+i por y para el Servicio de las Empresas (Fondo Tecnológico), participa en la cofinanciación de los buques Ramón Margalef, Ángeles Alvariño y Francisco de Paula Navarro, así como en el Vehículo de Observación Remota (ROV) Liropus 2000.