Un choque de estilos en el Vicente Calderón entre la fortaleza del Atlético de Madrid y la posesión y la calidad del Barcelona decidirá mañana una plaza en las semifinales de la Liga de Campeones, en un desafío de máxima igualdad, tras el 1-1 en el partido de ida en el Camp Nou.

Los empates han sido una constante esta temporada en los duelos entre ambos equipos. Desde el pasado mes de agosto, con su doble enfrentamiento en la Supercopa de España (1-1 y 0-0) hasta el martes anterior en el torneo europeo (1-1), pasando por el 0-0 con el que saldaron su encuentro en la decimonovena jornada de la Liga.

Ni la intensidad, el rigor táctico y el contragolpe del Atlético le han ganado a la precisión, la posesión y la técnica del Barcelona, ni viceversa. Ahora vuelven a cruzarse con un plaza en semifinales de Liga de Campeones en disputa y con un resultado que mantiene todo abierto, pero que obliga al Barça a marcar algún gol.

El billete a las semifinales de la ''Champions'' es un reto pendiente del Atlético desde hace 40 años. Desde 1974 no alcanza esa fase de la máxima competición continental, precisamente en la edición de la que fue subcampeón frente al Bayern Múnich. El Barcelona ha alcanzado esa ronda en las últimas seis ediciones.

Ahí apuntan mañana en el Vicente Calderón, donde el Barcelona no pierde desde febrero de 2010 y donde el Atlético es prácticamente infalible en esta temporada, con 20 victorias, cuatro empates y sólo una derrota -en Copa del Rey ante el Real Madrid (0-2)- en sus 25 partidos en casa de este ejercicio.

Su posición en el campeonato, separados sólo por un punto con los rojiblancos por delante, su trayectoria en la Liga de Campeones y sus números en este curso hablan de un encuentro del máximo nivel, al que el Atlético llega en racha, sin derrota en sus nueve duelos más recientes, y muy pendiente de Diego Costa y de Arda Turan.

Una lesión muscular, en el caso del primero, sufrida a la media hora del encuentro de ida en el Camp Nou, y una pubalgia, en el del segundo, ponen en duda la presencia mañana en el partido de ambos futbolistas, esenciales en el esquema del argentino Diego Simeone, sobre todo el atacante, su máximo goleador este curso con 33 tantos.

Más allá de su evolución, con Adrián López como alternativa, David Villa será titular, quizá escorado a un lado, con Raúl García en el otro y con Koke Resurrección como media punta. En el resto de posiciones, Simeone apostará por su once tipo más reciente, con Tiago Mendes en el medio centro junto a Gabi Fernández, que cumplió sanción en el último y sufrido triunfo contra el Villarreal.

La defensa será la habitual, con Joao Miranda, que descansó el sábado. La completarán Juanfran Torres, Diego Godín y Filipe Luis. La portería será para Thibaut Courtois, que sólo ha recibido dos tantos en los últimos ocho encuentros oficiales y que ha dejado su portería a cero en el Vicente Calderón en 38 de sus 69 partidos.

Enfrente, el Barcelona, después de salvado aquel ''match point'' en el Bernabéu, donde estaba en juego la posibilidad de mantenerse con vida en la Liga, volverá a vivir mañana otro momento de los que pueden marcarle la temporada.

En el Calderón, por una vez los términos se han invertido y el Barça es el que se juega más que el rival. Tras el empate a 1-1 en el Camp Nou, los del ''Tata'' Martino tienen que salir a por el partido, necesitan marcar un gol, pero sobre todo volver a creer en sí mismos.

Está en juego la supremacía del Barça en Europa, el único equipo que no ha faltado a las semifinales de la competición en las últimas seis temporadas.

En juego también la credibilidad de Martino, la de Leo Messi, que anda desconectado en los últimos partidos y no acaba de ser el jugador desequilibrante, y la del equipo en general, que está con opciones en las tres competiciones y en diez días se lo juega prácticamente todo.

El papel de Messi es fundamental en el Barça. El último buen partido del argentino fue en el Bernabéu, pero no está fino a pesar de seguir marcando.

Por eso, mañana, seguramente jugará en otra posición. Enjaulado como falso nueve, Simeone ha desactivado a Messi. Ahora Martino podría darle un nuevo giro a su posición en el campo y situarlo por la derecha.

De hecho, la idea del técnico azulgrana pasa por otros tres condicionantes. Primero alinear a Neymar por la izquierda, su posición natural, donde se siente mejor y donde ha rendido a su mejor nivel. El último ejemplo: el gol en el partido de ida marcado cuando fue cambiado desde la banda derecha a la izquierda.

Segundo alinear a Cesc como falso nueve, creando espacios, ofreciendo pases interiores y llegadas desde la segunda línea. Pero lo más interesante es el tercer condicionante, darle todos los galones al jugador más en forma del Barça: Andrés Iniesta.

El ascendiente de Iniesta sobre el equipo se comprueba cuando juega en el centro, cerca de Xavi y resguardado por Busquets. Desde allí explota toda su credibilidad mucho más que desde la izquierda, donde Martino le ha alineado en los partidos importantes de esta temporada.

Si se confirma sería repetir el planteamiento utilizado en la primera vuelta de la Liga ante el Real Madrid en el Camp Nou. Una manera de utilizar a los ''jugones'', pero revolviendo la posición de algunos de ellos sobre el terreno de juego.

Con las bajas de Víctor Valdés y de Gerard Piqué, no hay mucho espacio para las sorpresas en la retaguardia. Pinto será el portero con Alves, Mascherano, Bartra y Alba en defensa.

Atlético de Madrid: Courtois; Juanfran, Miranda, Godín, Filipe; Gabi, Tiago; Raúl García, Koke, Villa; Diego Costa o Adrián.

Barcelona: Pinto; Alves, Bartra, Mascherano, Alba; Busquets, Xavi, Iniesta; Messi, Cesc y Neymar.

Árbitro: Howard Webb (Inglaterra).

Estadio: Vicente Calderón.

Hora: 19:45