La Comisión de Industria del Congreso de los Diputados rechazó ayer una proposición no de ley (PNL) de Nueva Canarias que quería instar al Gobierno central a autorizar a Canarias a celebrar una consulta popular en las islas sobre las prospecciones petrolíferas en aguas cercanas al Archipiélago.

La iniciativa se había debatido el miércoles y se votó ayer, dos días después de que la Cámara Baja debatiera y rechazase la toma en consideración de la propuesta del Parlamento catalán para que se autorice, convoque y celebre un referéndum en Cataluña sobre su futuro político; una propuesta sobre la que los nacionalistas canarios dividieron su voto -abstención CC y apoyo NC-.

Precisamente, los dos diputados de CiU, Jordi Jané e Inmaculada Riera, se levantaron de sus sitios a la hora de efectuarse la votación, según señalaron fuentes parlamentarias "por tener que tratar un asunto urgente". Así, NC contó con el respaldo insuficiente del PSOE y de la Izquierda Plural (IU-ICV-CHA) -15 votos-, y con el voto en contra del PP y de UPyD, que sumaron 24 votos.

Pedro Quevedo, diputado de NC, argumentó que la consulta era "constitucional, legal y posible". Según recalcó, "no deja de ser una casualidad, buena o mala", que esta iniciativa coincidiera con la de la consulta catalana. "Yo confío, quedando claro que la naturaleza de las cosas que se plantea es distinta, en que el resultado no sea tan exiguo como el alcanzado ayer por aquellos que votamos a favor de la propuesta del Parlamento de Cataluña", subrayó.

A su juicio, debe haber un debate "público, amplio, claro y rotundo" sobre cuáles son los beneficios, perjuicios y a qué tiene que atenerse el pueblo canario a la hora de aceptar o no una iniciativa de esta naturaleza. "Ese debate no ha existido", criticó Quevedo.

Incidió en que la búsqueda de petróleo debería plantearse siempre en un debate público, y alertó sobre las posibles consecuencias de este tipo de prospecciones, sobre las que se han pronunciado sectores científicos, medioambientales, organizaciones internacionales y ayuntamientos de todos los "tipos y colores".

Mientras, Manuel Torres, del PP, tachó esta propuesta de "cicatera, interesada, poco seria y enmarcada en un halo de filibusterismo político", al pretender seguir creando "confusión y enfrentamiento" entre los ciudadanos canarios, aprovechando un asunto que está completamente "claro y reglado".

Según defendió, las prospecciones no se encuentran en el ámbito geográfico de las aguas canarias, de acuerdo con lo establecido en la Ley aprobada por el entonces Gobierno socialista, "ahora alentadores de la oposición a este proyecto".