Llegó el día. Después de 13 años de existencia Microsoft deja de dar soporte a Windows XP. Ha sido, y probablemente será, el sistema operativo que mejor resultado ha ofrecido en la historia por la cuota de instalación que ha llegado a tener en el parqué de ordenadores en el mercado. Sin embargo, esto no supone que Windows XP deje de funcionar en uno de cada cuatro ordenadores en los que todavía está instalado.

La gran mayoría de los propietarios de un ordenador que tiene este sistema solo se verá afectado en que Microsoft no ofrecerá actualizaciones ni parches de seguridad. Si se tiene instalado un buen antivirus y actualizado este punto no debería de ser un problema. Tampoco ofrecerá soporte para nuevos dispositivos que conectar el ordenador, aunque tampoco debería de ser un problema porque es normalmente el propio fabricante el encargado de incorporar este soporte.

Las pymes serán las principales afectadas a corto y medio plazo. En un escenario económico adverso la gran mayoría de empresas no tiene un plan de modernización tecnológica, o al menos uno que les permita adaptarse a alguno de los Windows disponibles en el mercado. Sus proveedores de programas informáticos también dejarán tarde o temprano de dejar soporte a la versión de sus soluciones para Windows XP, por lo que la inversión en actualizarse será una obligación. Este escenario se ve agravado porque los ordenadores anteriores a 2007 tendrán dificultades para tener instalado una versión moderna de Windows. La recomendación es realizar una planificación y preguntar a los proveedores de sus programas por la fecha en la que podrían dejar de dar soporte a su programa para Windows XP. Otra opción es migrar a software libre siempre que puedan disponer de los programas que necesitan.

La Administración Pública también se ve afectada y tendrá que acelerar sus planes de renovación o adaptación a otros entornos. Los colectivos que defienden la utilización de software libre en la administración han criticado que se va a realizar una actualización a la última versión de Windows en lugar de crear un concurso público. Algunos sindicatos han preguntado formalmente por la integridad del trabajo que se realiza.

"Ha llegado el momento de invertir nuestros recursos en apoyar tecnologías más recientes", afirma Microsoft en un comunicado de prensa. Realmente han forzado la jubilación anticipada de su sistema operativo porque sigue siendo el segundo sistema más utilizado en el mundo. Su última creación, Windows 8, apenas llega al 10% del mercado a pesar de estar diseñado para ser utilizado tanto en ordenadores como en dispositivos móviles. La creación de una tienda de aplicaciones de Windows como las que ya ofrecían para Android o la de Apple, supone una nueva vía de ingresos para Microsoft y para que tenga un volumen de negocio parecido al que ya ofrecen las tiendas para smartphone y tabletas, requiere que su última versión de Windows gane cuota de mercado.

Vea en su móvil la historia de la imagen de fondo de pantalla que se muestra por defecto en Windows XP, con el nombre de "Bliss" (felicidad).

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