El jefe del Gobierno, Mariano Rajoy, reprochó ayer a la Generalitat y a CiU que le estén pidiendo saltarse la voluntad de las Cortes y las sentencias del Tribunal Constitucional y, ante la situación que han creado en Cataluña, les pidió una respuesta y les ha aconsejado para ello "imaginación".

"Claro que queremos dialogar, pero no olvide que ni el Tribunal Constitucional (TC) ni las Cortes admiten el referéndum porque es ilegal, y, por tanto, les corresponde a ustedes decir ahora qué quieren que hagamos", señaló Rajoy ante el pleno del Senado en respuesta a una pregunta del portavoz de CiU, Josep Lluis Cleríes.

Cleríes reprochó a Rajoy que su supuesto amor a Cataluña se traduzca en decisiones de "recentralización" y, en la víspera de Sant Jordi, se acercó hasta el escaño del jefe del Gobierno para regalarle el libro "Els altres catalans", del que fuera senador de las Cortes constituyentes Francisco Candel.

Esta publicación cumplió 50 años y versa sobre la integración en Cataluña de ciudadanos procedentes de otros territorios.

El jefe del Gobierno, que le dio la mano al recibir el libro, le afeó que en su intervención previa lanzara un mensaje del que se deducía que todo lo que hace el Ejecutivo central está mal y todo lo que lleva a cabo el de la Generalitat es lo correcto.

Ante las alusiones a su aprecio por Cataluña, precisó que el afecto no le nubla su conciencia ni le impide ver las cosas con realismo y con responsabilidad.

"El afecto me ayuda a cumplir con mis obligaciones como gobernante, a buscar el interés general y a no jugar con los sentimientos de los demás, y si el afecto le parece un motivo de sorna, a mí me parece un motivo de respeto, como el que le tengo a usted y el que espero que usted me tenga a mí" señaló dirigiéndose al dirigente de CiU.

Rajoy se ratificó en todos los argumentos que expuso el pasado 8 de abril ante el pleno del Congreso que rechazó la petición del Parlament sobre la competencia de convocar un referéndum y en el que dijo, en alusión a Artur Mas, que algunos "que promovieron ese debate no consideraron oportuno y conveniente" estar y "ellos sabrán por qué".

Recalcó que lo que hizo en ese debate fue defender la legalidad y explicar las consecuencias que tendría una secesión.

En una intervención, Rajoy subrayó que nunca ha habido más autogobierno en Cataluña y reprochó a los dirigentes que defienden la independencia no darse cuenta de por dónde va el mundo.

El presidente del Gobierno aseguró que él respeta todos los sentimientos, pero pidió también a los representantes de CiU que respeten los sentimientos diferentes a los suyos.