El petróleo hizo pasar ayer un serio apuro al Partido Popular (PP) en el Senado. Los populares acabaron rechazando una propuesta del PSOE en la que se pedía que se instase al Gobierno central a suspender temporalmente las prospecciones petrolíferas, hasta llegar a un entendimiento con las comunidades afectadas (Canarias y Baleares) y a estudiar la modificación de la ley de hidrocarburos.

Y todo ello a pesar de la intensa negociación que, durante más de tres horas, mantuvieron los representantes de PP y PSOE con la idea de cerrar un texto común, algo que finalmente no fue posible.

Según fuentes parlamentarias, las presiones de los senadores canarios del PP a sus representantes en la negociación parecen estar detrás del fracaso en el acuerdo entre populares y socialistas.

Es más, fuentes del Ministerio de Industria consultadas ayer por este periódico reconocieron que se barajaron diversos textos alternativos al del PSOE con el fin de llegar a un acuerdo mayoritario, cuestión que, finalmente, no se produjo por las limitaciones que, a juicio de los socialistas, introducía el texto del PP.

No obstante, y pese al rechazo de ayer, el petróleo deja abierta una vía de confrontación en el seno de los populares. Por un lado, cuatro de los cinco diputados conservadores de Baleares, José Sala, Lorenzo Bosch, Margarita Durán y María Antonia Grau, respetaron las órdenes de su partido en el archipiélago y votaron a favor de la iniciativa original del PSOE. Juana Francisca Pons, sin embargo, decidió seguir la línea oficial y votó en el mismo sentido que el resto del grupo parlamentario popular.

Y, por otro, el propio senador del PP que abrió la posibilidad de negociar una propuesta con el PSOE, José Ignacio Palacios, atribuyó durante el debate esa propuesta al jefe del Ejecutivo central, Mariano Rajoy.

Y es que, como se recordará, tras la reunión de la pasada semana entre el propio Rajoy y el jefe del Ejecutivo canario, Paulino Rivero, el presidente canario avanzó que su homólogo estatal estaba dispuesto a suspender temporalmente los sondeos en Canarias y Baleares, cuestión que quedó patente a primeras horas de la mañana, pero que se diluyó conforme avanzó el día.

Tras conocerse el resultado de la votación, el senador socialista y expresidente de Baleares Frances Antich dio la "enhorabuena" a los parlamentarios del PP que rompieron la disciplina de voto y apoyaron su moción, que "expresa el sentir de las instituciones y la ciudadanía de las islas".

Mientras, para el senador de Coalición Canaria (CC) Narvay Quintero, que apoyó la moción del PSOE, ayer se puso de manifiesto en el Senado que en el PP hay dos corrientes de opinión en torno a las prospecciones petrolíferas: "La del Gobierno y la del Ministerio de Industria, que no quiere dar marcha atrás".

Quintero se mostró convencido de que Palacios contaba con el apoyo del Gobierno al hacer su propuesta de paralizar temporalmente los sondeos para llegar a un acuerdo con las comunidades afectadas.

También abogó por cambiar la legislación por ser "muy antigua" y carecer de protección ambiental, al tiempo que instó al Gobierno a trasponer ya la directiva comunitaria en la materia, que es "más garantista" con el medio ambiente.

Y tras criticar la falta de política ambiental del Ejecutivo de Rajoy, el único de la UE que carece de un ministerio exclusivo de medio ambiente, Joan Saura, de la Entesa, pidió también parar los sondeos por ser una "amenaza" para el ecosistema y suponer un "ataque" a la economía vinculada al turismo y la pesca.

Ramón Alturo, de CiU, abogó, por su parte, por el traspaso de las competencias a las comunidades autónomas.