La propuesta de sacar agua de la Fuente Santa para llenar los spa de los hoteles de La Palma, tal y como informó ayer EL DÍA, es apoyada por la patronal turística a través del CIT Tedote, que ha solicitado al Cabildo de La Palma, en una petición registrada el pasado 16 de mayo, una reunión para analizar esta experiencia piloto que "no entra en discrepancia y oposición", advierte, con el proyecto que impulsa la institución insular y el Ayuntamiento de Fuencaliente de crear en la zona un balneario.

Los empresarios quieren que se obtenga rentabilidad de las aguas, después de años perdidos esperando por su aprovechamiento. A propósito, advierten de que se trataría de una extracción mediante un sistema "mínimamente invasivo" para la Fuente Santa, transportando el agua en cubas isotérmicas e isobáricas para mantener la temperatura y el dióxido de carbono, y con ellas llenar los spa de la Isla. De esta forma, y tan solo por el hecho de tener estas aguas en los lugares adecuados y ya clasificados como spa, "La Palma adquiriría la calificación de destino termal, entrando a formar parte inmediatamente del círculo de los grandes balnearios europeos, a los que se sumaría la novedad, por histórica, de los beneficios de la Fuente Santa", apunta la patronal.

El CIT Tedote hace hincapié en que cada uno de los titulares de los spa "se responsabilizará de mantener el agua de la Fuente Santa con un circuito interno, que además de su limpieza y esterilización, mantendrá su temperatura y el dióxido de carbono en los mismos parámetros en los que se les entrega el agua". Va incluso más allá para asegurar que cada spa estará bajo la supervisión de un equipo formado por doctores en medicina.

Sobre los efectos negativos que pudiera tener la extracción de agua para la propia galería, la patronal apunta que "suponiendo que diez spa se acojan a esta iniciativa y evaluando que cada una de las piscinas que albergue el agua de la Fuente Santa tenga una capacidad de 100 metros cúbicos, se necesitarían 1.000 metros cúbicos de agua termal". Los informes técnicos realizados apuntan que se pueden extraer del lugar, sin merma de sus características, un caudal continuo de dos litros por segundo, por lo que "con solo extraer ese caudal durante seis días, tendríamos agua suficiente para llenar los diez spa, sin afectar en absoluto a la calidad del agua".

En la solicitud presentada en el Cabildo de La Palma, los empresarios dicen que para extraer el agua desde la galería hasta los camiones cuba no sería necesario entrar en la Fuente Santa, "puesto que se dispone de un sondeo capaz de albergar la tubería de extracción que se ubica en los aparcamientos de la playa de Echentive". La bomba, con caudal restringido a dos litros por segundo, "se colocaría en las pocetas de la galería que se estimen convenientes por los técnicos cualificados".

El CIT Tedote aclara que teniendo en cuenta que la mayoría de los spa se encuentran en instalaciones hoteleras, la apuesta de convertir La Palma en destino termal, "no solo sería para nuestros turistas, sino que con una adecuada campaña se facilitaría el acceso a toda la población local".

El alcalde defiende que el agua "santa" es de Fuencaliente

La posibilidad de sacar agua de la Fuente Santa para los spa de la Isla no convence al alcalde de Fuencaliente. Es cierto que no conoce en profundidad la propuesta que se plantea ni cómo se quiere realizar la extracción, pero Gregorio Alonso se muestra contundente, al menos en principio, al rechazar esta experiencia piloto. A propósito, declaró a EL DÍA que "es una iniciativa que está fuera de lugar y a la que me opongo frontalmente. Estamos luchando para tener un balneario y ese debe ser el único objetivo". En esa línea, explicó que "el agua será para las necesidades del balneario que se construya. Si cuando esté en marcha, no antes, vemos que sobra agua, pues ya se podrá repartir. Tampoco somos egoístas". Además, el político sureño deja claro que "la explotación del agua de la Fuente Santa pertenece al ayuntamiento. El agua es de Fuencaliente, por lo que aquellos que tengan ideas o propuestas para su utilización no deberían dirigirse al Cabildo sin antes preguntar al ayuntamiento". Cabe destacar que el vicepresidente insular y responsable de Aguas, Carlos Cabrera, se mostró partidario en declaraciones a EL DÍA de analizar la propuesta, aunque dejó claro que "hay que contar con el visto bueno del ayuntamiento". Al ser cuestionado por la tardanza en el aprovechamiento de un recurso que todos coinciden que es único y del que podrían vivir miles de personas, Gregorio Alonso dijo que "cambiar las leyes cuesta. Todos sabemos la tramitación que llevan para ser modificadas. Si algún político sureño que está detrás de esta idea hubiera hecho algo hace unos años (presentando las reclamaciones al documento de protección de la zona donde está el manantial), quizás el balneario ya estaría construido".