Tanto el alcalde de Santa Cruz de Tenerife, el nacionalista José Manuel Bermúdez, como el concejal socialista de Urbanismo, José Ángel Martín, se esmeraron ayer en desmentir cualquier fisura en el pacto de gobierno ante los medios de comunicación, asegurando en múltiples ocasiones que están tranquilos y que no volverán a hablar de este asunto.

"El alcalde me ha dicho que puedo estar muy tranquilo y yo le creo. Estamos trabajando igual que siempre y no hay ningún tipo de discrepancia entre nosotros ni entre los demás miembros del gobierno", manifestó ayer José Ángel Martín al ser preguntado por la decisión de Bermúdez de trasladar a la dirección insular y nacional de su partido la decisión de romper o no el pacto, después de que 24 miembros del comité local le hayan solicitado por escrito la destitución del edil de Urbanismo.

Martín además aseguró "no tener ninguna duda" de que el acuerdo de gobierno llegará hasta el final del mandato.

Previamente a estas declaraciones, y en los micrófonos de Radio El Día, había declarado que lejos de haberse sentido humillado, todo lo sucedido le está fortaleciendo y le ha hecho tener mayor presencia pública de la que ya disfruta por su cargo.

"Esto es una matraquilla que no es nueva, ya que incluso desde que llegué al ayuntamiento me lo está diciendo Hilario. En su momento lo hablé con él y desde entonces no le he dado mayor importancia", insistió Martín, que considera que la petición de que sea relevado de Urbanismo no es más que un problema interno en el seno de Coalición Canaria.

"Este no es un problema que tenga que ver conmigo o me afecte a mí o al equipo de gobierno, es un problema de Coalición en Santa Cruz que ahora se ha trasladado a Tenerife y Canarias", sentenció Martín.

Por su parte, el alcalde insistió en que no le va a dedicar "ni un minuto más" a esta "batallita".

"La ciudad y la ciudadanía se merecen que se trabaje por ellos y no voy a perder más tiempo en esto. Me sentaré en las ejecutivas de mi partido a escuchar qué es lo que tiene que decir y punto", declaró ayer Bermúdez, después de quejarse públicamente del Cabildo de Tenerife y del Gobierno de Canarias, a los que volvió a acusar de no cumplir con la capital en cuestiones como la depuradora o el parque Viera y Clavijo.