El alcalde de Candelaria, José Gumersindo García Trujillo, y el concejal de Infraestructuras, Domingo Ramos, le han planteado al director de Carreteras del Gobierno canario, Juan Ventura Medina Aguiar, que la prioridad del municipio en lo que respecta al proyecto de Mejoras Ambientales y Remates de la autopista del Sur (TF-1) es que se finalicen los accesos al puente que se colocó en su momento en Brillasol, sin olvidar el de Lomo del Caballo, que se podría dejar para una fase posterior.

Así lo planteó el regidor candelariero al director de Carreteras en la visita que realizaron a uno de los puentes, el de Brillasol, donde García Trujillo hizo énfasis en que este caso es imprescindible para mejorar el tráfico de la urbanización Punta Larga, "reconduciendo el paso de los vehículos que ahora lo hacen por un túnel por debajo de la autopista".

El presidente de la corporación municipal asume la decisión de no realizar el mural de entrada a Candelaria, porque no hay disponibilidad presupuestaria en estos momentos, pero pide que el proyecto se retome en un futuro cuando la situación económica lo permita.

En lo que respecta a que se afirme que "la seguridad vial aconseja también la inejecución de esta medida correctora por poder producir una evidente distracción a los conductores", no le parece comprensible porque es un proyecto que contaba con dotación presupuestaria, 600.000 euros, estaba aprobado por el Ejecutivo autónomo y contaba, incluso, con financiación del Estado.

En esta línea, el concejal de Infraestrcuturas apunta que la excusa de la Comisión de Ordenación del Territorio y Medio Ambiente de Canarias (Cotmac) sobre la seguridad no se sostiene porque por esa misma regla habría que quitar todos los elementos que hay en las rotondas de Canarias, así como la publicidad en las vías.

Domingo Ramos apunta que los puentes están ejecutados a falta del remate final desde 2006 y el de la zona de Brillasol es doblemente necesario, para el tráfico y para aumentar la seguridad vial en el lugar.