La Universidad de La Laguna (ULL) superó ayer uno de los últimos trámites para empezar el próximo curso con una nueva estructura, más ligera, de centros y departamentos. El Consejo de Gobierno de Canarias aprobó el decreto de creación de los nuevos centros, de forma que en breve la institución académica pasará de 16 facultades y siete institutos a siete y dos, respectivamente, surgidos de la fusión de los centros actuales, además de una escuela de doctorado y posgrados.

Una vez que el decreto sea publicado en el Boletín Oficial de Canarias (BOC), la pelota pasará de nuevo a manos de la Universidad, que tendrá que aprobar un reglamento marco que proporcione las directrices para el funcionamiento de los centros. El rector, Eduardo Doménech, nombrará entonces a siete decanos y directores "transitorios" que tendrán tres meses para elaborar los reglamentos de sus facultades e institutos. Cuando hayan finalizado este trabajo, convocarán las elecciones de las que saldrán los nuevos dirigentes de los centros.

Este es, detallan fuentes de la ULL, el proceso que debe seguirse a partir de este momento y que, previsiblemente, culminará cuando el curso ya se haya iniciado, entre otras cosas porque la institución cierra por completo durante tres semanas de agosto, una de las medidas de ahorro introducidas por el equipo de gobierno.

En las facultades de Derecho y Educación no será necesario el nombramiento de dichos decanos interinos, ya que ambos centros, los de mayor tamaño y volumen de estudiantes, no experimentarán ninguna fusión, y serán sus actuales dirigentes quienes continúen al frente de ellos.

Eduardo Doménech planteó por primera vez la posibilidad de fusionar y suprimir centros y departamentos durante una sesión del Claustro celebrada en febrero de 2013. Allí explicó los motivos que habían conducido a adoptar esta medida: ahorrar en sueldos de cargos directivos, eliminar eficiencias y desigualdades y afrontar el futuro de la institución con una estructura más sostenible. Pese a ocupar puestos intermedios en cuanto al volumen de alumnos y oferta de títulos de grado -24 y 20 del país, respectivamente-, la ULL es la octava en número de centros y la undécima en departamentos, según datos del Ministerio de Educación.

Las nuevas facultades serán las de Humanidades -producto de la fusión de Bellas Artes, Filología, Geografía e Historia y Filosofía-; Ciencias -que aglutinará Biología, Matemáticas, Física y Química-; Ciencias de la Salud -que agrupará las actuales Medicina, Psicología, Farmacia y Enfermería y Fisioterapia-; Economía, Empresas y Turismo; y Ciencias Políticas y Sociales y de la Información. A ellas hay que unir las de Educación y Derecho.

Habrá, además, dos escuelas técnicas superiores: Ingeniería I -en la que se encuadrarán Ingeniería Industrial e Informática- e Ingeniería II -que englobará Arquitectura Técnica, Ingeniería Civil, Ingeniería Agraria y Náutica.