La onda epidémica de gripe y el frío quedan ya atrás, pero la situación de las Urgencias del Hospital Universitario de Canarias (HUC) no se ha resuelto. Las instalaciones de este servicio experimentan aún momentos de saturación y ofrecen las mismas imágenes de pasillos invadidos por camillas ante la falta de camas que podían verse durante el invierno.

Intersindical Canaria (IC) denunció ayer, de hecho, que la situación de las Urgencias "continúa agravándose por días", tanto que lo que ocurre actualmente es "grave, peligroso y sin precedentes". Todos los pasillos anexos al servicio se encuentran con pacientes de todas las edades y diferentes diagnósticos, "sin intimidad alguna", que bloquean el tránsito mientras esperan para ser atendidos o ingresados en el centro, detalla el sindicato, que también constata un ambiente laboral "de crispación extrema" como consecuencia de estas condiciones de trabajo.

Por su parte, la dirección del HUC reconoce que, desde el lunes, "ha acudido un número importante de pacientes que requieren ingreso al servicio de Urgencias". El hospital, junto a la Dirección de Área, "está trabajando para solventar esta situación a través de la derivación de pacientes y el ingreso en el centro hospitalario tras las altas hospitalarias".

Para Intersindical Canaria queda claro que los "picos asistenciales temporales" a los que suele aludir el Servicio Canario de Salud para explicar la situación de las Urgencias son, en realidad, un "caos" que se mantiene durante los 365 días del año. Los repetidos encuentros mantenidos con la administración no han dado resultado, puesto que el problema "no ha hecho sino empeorar".

La escasez de personal y las deficiencias estructurales de las instalaciones, así como el "déficit general de camas hospitalarias", son, según IC, los factores que explican este estado de permanente congestión del servicio.

La afluencia al hospital se ha incrementado de forma considerable después de que asumiera, a mediados de 2013, a los pacientes del noroeste de Tenerife. La apertura de las Urgencias del Hospital del Norte ha sido insistentemente reclamada por las instituciones -en especial por el Cabildo tinerfeño, muy crítico con el Gobierno en este aspecto- como una vía de solución al problema. El Ejecutivo ha anunciado que el recinto se pondrá en marcha antes de que finalice julio, un adelanto sobre la fecha inicialmente previsto -finales de año- provocado por la presión de las administraciones.