José María Odriozola, presidente de la Federación Española de Atletismo desde hace 25 años, asegura que no tiene intenciones de abandonar el cargo antes de que expire su actual mandato, concede a Barcelona "buenas opciones" de organizar los Mundiales del 2019 y observa "buena salud en el atletismo español medio".

"¿Abdicar? Ni me lo he planteado, salvo que la asamblea aprobara un voto de censura y tuviera que irme, pero yo tengo un compromiso hasta diciembre del 2016 y voy a seguir a pesar de que haya momentos en que esté un poco cansado y harto de algunas cosas. La Federación, gracias a mi equipo, funciona correctamente y no hay ningún motivo para dejarlo", declaró durante su visita a la sede de EFE en Madrid.

Reiteró que no piensa presentarse a la reelección. "Ya lo dije y eso va a misa. Siete periodos son suficientes y lo que sí intentaré en 2015 es presentarme a la reelección en el Consejo de la IAAF porque ahí tengo todavía una labor que hacer y es importante que España esté representada, y no es fácil entrar para una persona nueva. Yo estoy allí muy bien considerado, modestia aparte".

A quienes le achacan una excesiva presencia en el cargo, atletas como Jesús Ángel García Bragado o exatletas como María Vasco, Abel Antón o Fermín Cacho), dijo: "Son los cuatro que hablan, y no se ponen de acuerdo. Unos dicen que tenía que haberme ido hace dos años, otros cuatro, otros siete...".

"Esta gente, ¿qué está haciendo por el atletismo español? El único, Chuso (García Bragado), que todavía está en activo. Pues que se dedique a competir. Respeto sus opiniones aunque pienso que deberían estarme agradecidos personalmente por lo que he hecho por sus carreras deportivas, pero la gente, en general, no es agradecida. Somos un país libre y que cada uno diga lo que quiera, pero son estos cuatro, no hay más", señaló.

"A mí lo que me gustaría", añadió, "es que este equipo, que lleva ya muchos años y lo hace muy bien, fuera utilizado en su mayor parte por el que venga o la que venga. Somos en muchos casos la envidia de otras federaciones española y de muchas internacionales, que dan sombrerazos no por mí, sino por el equipo de la Federación".

Odriozola afirmó que la Federación Internacional (IAAF) "está encantada con la candidatura de Barcelona para los Mundiales del 2019. Allí se celebró el centenario de la IAAF. Yo comuniqué la idea de presentar el proyecto de Mundiales en las altas esferas de la IAAF y causó muy buena impresión. También compiten Eugene (EEUU) y Doha. Supongo que a esta última le afectará todos los problemas que está habiendo con el Mundial de fútbol".

"Barcelona lo tiene todo: estadio, infraestructura logística, aeropuertos, hoteles, un Ayuntamiento relativamente saneado, tiene nombre, experiencia organizativa. ¿Los dos grandes inconvenientes de los rivales?. Doha, el clima. Habría que mover el campeonato a fechas inasumibles para televisión, y Eugene no tiene estadio. Sólo uno de 15.000 espectadores, precioso pero pequeñito. El presidente de Nike ha dicho que no le gustaría morirse sin ver allí un Mundial y está dispuesto a construirlo, pero hay una cláusula de la IAAF, la que eliminó en su día a Valencia, según la cual el estadio tiene que estar construido, no vale en proyecto", subrayó.

El atletismo español, a su juicio, "disfruta de buena salud en el nivel medio". "Evidentemente, nos faltan algunos iconos. Tenemos a Ruth Beitia, que ahora es la atleta española con más triunfos y disfruta como nunca, y unos cuantos que vienen pegando fuerte como Eusebio Cáceres, Miguel Ángel, Didac Salas, Bruno Hortelano, jóvenes que para los Juegos de Río estarán peleando por puestos de honor".

"Pero lo mejor de todo", indicó, "es que tenemos gente joven muy prometedora. Acaban de celebrarse en Bakú las pruebas de selección para los Juegos de la Juventud de China, y hemos metido a once, más que nunca. Son atletas de menos de 18 años. Al Mediterráneo sub 23 llevamos 50, con mínimas duras. Para los Europeos de Zúrich tenemos ya a 70 clasificados, y podemos llegar a 80 si acceden los relevos".

"Lo que pasa", advirtió, "es que la competencia en el atletismo es cada vez mayor, sobre todo en carreras. Primero porque somos el deporte más universal. A diferencia del fútbol, hay pequeños países que pueden tener campeones olímpicos en una prueba determinada. Y encima las nacionalizaciones, que cada vez proliferan más. Nosotros hacemos una o dos al año".

"Un cubano se nos ofreció hace poco, no hicimos caso y el otro día ya vi que se ha nacionalizado turco. Y Bahrein, los Emiratos, Holanda, Suecia...", señaló.

Sobre los Europeos de Zúrich, en agosto próximo, dijo que son "ilusionantes" y que los aficionados españoles "lo van a pasar bien, viendo a muchos atletas en las finales, aunque muchos países europeos han progresado mucho".

"Ahora tenemos el campeonato de selecciones y nuestro sitio natural es entre el séptimo y el noveno. Mantenernos sí, porque son doce y estaremos entre los nueve mejores. Zúrich va a ser para disfrutar y ver el nivel real del atletismo español", añadió.

Odriozola destacó la presencia de veteranos: "No es sólo Ruth Beitia. También veo muy ilusionada a Nuria (Fernández). Loli Checa parece que vuelve por sus fueros. A Auri (Lorena Bokesa) la veo en la final de 400".

"De Kevin (López) siempre se habla, aunque le falta confirmar. Veo bien a Víctor García en obstáculos. Nuestra asignatura pendiente ahora es el fondo y el mediofondo, porque no estábamos acostumbrados a los niveles de ahora, éramos los mejores en Europa y ahora nos cuesta mucho sobresalir, pero confío en algunos jóvenes que vienen pegando fuerte", indicó.

Preguntado por el sucesor del senegalés Lamine Diack en la presidencia de la IAAF, señaló como favorito al británico Sebastian Coe: "Es el favorito y su experiencia en los Juegos de Londez es muy valiosa para la IAAF. A Sergey Bubka se le pasó el arroz por no haber sido candidato antes, y con lo que está lloviendo ahora en su país (Ucrania)".