La selección de Brasil se ejercitó hoy en el Arena Corinthians, polémico estadio al que aún faltan retoques a un día de la inauguración del Mundial, en una suave sesión que contó con Neymar practicando libres directos con bastante acierto.

En la víspera del inaugural Brasil-Croacia, los anfitriones realizaron estiramientos y practicaron varios ejercicios con balón.

Un partido en 25 metros fue lo más destacable de la práctica junto a ensayos de libres directos y penaltis.

Neymar, ídolo de la Seleção y estilete del Barcelona, intercambió balones largos con su inseparable colega de club, Dani Alves, participó en el partidillo y ejecutó varios libres directos desde dos perfiles del área grande.

El madridista Marcelo y el flamante fichaje del PSG francés David Luiz, ambos zurdos, también fueron instruidos por Luiz Felipe Scolari.

La intención del seleccionador es tener a sus jugadores bien entrenados para acciones de balón parado, cruciales en partidos cerrados como el que se prevé ante los croatas.

En los penaltis, se vio practicar al ariete titular Fred y al medio defensivo Paulinho Santos.

El entrenamiento, abierto apenas para la prensa, contó con decenas de entusiasmados trabajadores relacionados con el torneo, entre ellos operarios de la construcción.

A 24 horas del pitido inaugural del Mundial, el Cortinthians Arena, conocido popularmente como ''Itaquerão'', tiene aún muchos detalles por pulir, especialmente en una de las gradas del fondo.

El ruido de radiales, andamios en funcionamiento y vestigios de materiales de construcción salpican la visita al coliseo que tantos dolores de cabeza ha dado a la organizadora FIFA.